Elecciones 28M

Abascal apela al voto emocional en Alicante, pero no menciona sus propuestas

El presidente de Vox reivindica el agua pero sin desgranar su programa electoral | Los candidatos claman contra el cambio climático y las "paguitas"

Así ha sido el mitin de VOX con Abascal en la plaza del Ayuntamiento de Alicante.

Así ha sido el mitin de VOX con Abascal en la plaza del Ayuntamiento de Alicante. / Rafa Arjones

Alejandro J. Fuentes

Más de una hora de discursos, cuatro oradores sobre el escenario, multitud de personas escuchando... pero ni una sola propuesta específica para la ciudad de cara a las elecciones municipales en Alicante. Tampoco le han hecho falta las medidas concretas al presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, que se ha dado un baño de masas este miércoles frente al ayuntamiento de la capital alicantina ante sus "fieles", que han abarrotado la plaza desde primera hora de la tarde aplaudiendo prácticamente cada palabra del bilbaíno.

En torno a las 20:30, Abascal ha iniciado su intervención hablando, curiosamente, en valenciano: "Me gusta Alicante, 'la millor terreta del món'", ha proclamado con ímpetu al micrófono antes de reconocer que "si no lo digo, luego no me dejan entrar en casa", en alusión a su mujer, la alicantina Lidia Bedman. El presidente de Vox, que ha hecho varios guiños a la provincia, ha defendido que su partido "no es una moda", ya que su ideología nace "de lo que os han enseñado vuestros padres: el amor y el respeto a la patria y la familia".

Tras una intervención que ha arrancado numerosos aplausos y gritos de "presidente, presidente", el de la formación de ultraderecha ha proseguido pidiendo el voto desde el aspecto más visceral y emotivo, repasando las tradicionales líneas discursivas de la formación: combatir el separatismo, el feminismo "extremo", el uso de la lengua "que nos dé la gana" y la expulsión de ETA de las instituciones.

El candidato de Vox a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Flores, junto con el presidente de Vox, Santiago Abascal, en un acto este martes en Alicante

El candidato de Vox a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Flores, junto con el presidente de Vox, Santiago Abascal. / EP

Eso sí, ni una sola propuesta concreta que se traduzca en medidas a implementar en la ciudad o en la Generalitat. Ni por parte de Abascal, ni de ninguno de los otros tres oradores que han intervenido en el acto: la candidata a la Alcaldía, Carmen Robledillo, la actual síndica en las Cortes Valencianas, Ana Vega, y el candidato a la Presidencia de la Generalitat, Carlos Flores.

"Limpiar las políticas sectarias"

Robledillo, que ha abierto el acto, ha convertido su discurso en una llamada al voto obrero de los "trabajadores y los autónomos valientes", criticando la suciedad de Alicante y marcando como principal objetivo de la formación a nivel municipal "que los barrios dejen de estar abandonados". Por último, al más puro estilo de la niña de Rajoy, Robledillo ha vuelto a referirse a una vecina de 82 años de Los Ángeles -ya habitual de sus discursos y debates- que "se planteaba no votar a nadie porque está desencantada" y que no se ve reflejada en el cambio climático ni la contaminación, sino que le importan "las cosas pequeñas como la limpieza y la seguridad en las calles".

Ana Vega, en cambio, ha buscado estirar el discurso a lo largo de toda la provincia, con diferentes referencias a otros territorios alicantinos. Además, ha introducido en el mitin la polémica existente en torno a los trasvases, después repetida por Flores y Abascal: "El agua nos pertenece a todos los españoles y sirve para regar y para limpiar, limpiar las instituciones de políticas sectarias e imposiciones ideológicas".

Por su parte, Carlos Flores ha vuelto a descubrirse como el gran orador del evento: ágil en el discurso, irónico en los juegos de palabras y con la habilidad para arengar y conectar con una plaza absolutamente entregada. El candidato a la Generalitat, sin embargo, volvió a caer en algunas contradicciones durante su intervención. Tras ser presentado como "el próximo presidente de la Generalidad", en castellano, Flores se refirió al organismo autonómico en valenciano, lo que generó un breve murmullo. Además, criticó las subvenciones, las ayudas y las "paguitas" apenas unos minutos antes de que su líder nacional abanderase la necesidad de cerrar los "chiringuitos ideológicos" para destinar ese dinero a "ayudas a los necesitados, ayudas a la vivienda y ayudas al acceso al alquiler".