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Entrevista

Eva Granados: "Feijóo teme a Ayuso: le abrió la puerta del PP y guardó la llave"

"Radicales no son Esquerra Republicana o EH Bildu, sino quienes se oponen al aborto o a la ley de Memoria Democrática. Ellos nos ayudan a sacar adelante leyes que generan derechos"

Eva Granados, ayer en el Parlament después de su reunión con la presidenta Armengol. AIMAR PELLÉS

P. ¿En Madrid se habla de Balears?

R. ¡Y tanto! En el Senado hay una representación muy potente de lo que es la insularidad. Los senadores de Canarias y Balears tienen mucho peso específico respecto a la población. Es una cámara territorial y, especialmente, de los territorios que tienen ciertas especificidades. Se ha hablado mucho del Régimen Fiscal y las ayudas que necesitáis para igualar las condiciones de vida respecto a la Península.

P. El Senado no suele tener tanta expectación mediática como el Congreso y muchas personas creen que no sirve para nada.

R. Es importante, pero no tiene la atención del Congreso. Somos una cámara de segunda lectura y, por tanto, podemos vetar o enmendar leyes. Muchas las enriquecemos y se acaban de confirmar en el Congreso. El Senado sitúa en la agenda política temas a los que no se presta tanta atención. Como la insularidad, que es fruto de una ponencia trabajada durante dos años. Por ello ha tenido efecto en los Presupuestos. No siempre todo lo que es vistoso, famoso y ocupa portadas es lo más importante.

P. Se habla mucho de la polarización. ¿Es igual en el Senado que en el Congreso?

R. Por desgracia la polarización está en cualquier sitio donde haya gente que quiera imponer ideas radicales. En el Senado tenemos solo unos pocos senadores de Vox y en el Congreso son más de 50. El problema surge cuando quien se radicaliza es el principal partido de la oposición. La polarización también llega al Senado desde el momento en que el PP no quiere llegar a ningún acuerdo.

P. La derecha tilda a Esquerra Republicana o EH Bildu de "radicales". ¿Lo son?

R. Radicalidad es oponerse al aborto o a la ley de Memoria Democrática para abrir las fosas para enterrar a quienes murieron por la democracia en nuestro país. ERC o Bildu son socios de la investidura que hicieron posible un gobierno de coalición progresista, y además son quienes nos están ayudando a sacar adelante leyes que generan derechos para la ciudadanía como el salario mínimo profesional, la actualización de las pensiones o la ley de Eutanasia. Es verdad que tienen unas políticas de máximos o una visión del país con la que no coincidimos en ningún caso, y sobre eso no negociamos ni pactamos. Aquí la pregunta es cómo puede ser que el PP no quiere pactar leyes que mejoran la vida de la ciudadanía. Si nos fijamos en Balears, radical es el partido que presenta una enmienda a la totalidad a unos presupuestos que otorga recursos a las islas.

P. ¿A quién teme más el PSOE, a Isabel Díaz Ayuso o Alberto Núñez Feijóo?

R. El PSOE no teme a nadie porque tiene clara su hoja de ruta y los apoyos. Estamos seguros de que en las próximas elecciones la ciudadanía premiará a quienes han hecho un escudo social frente a un momento de incerteza muy grande. En todo caso, creo que es Feijóo quien teme a quien le abrió la puerta en el PP y se quedó la llave. A quienes le pusieron allí, porque el proceso no fue nada democrático.

P. Feijóo ahora es senador y le ve con frecuencia.

R. Te tengo que matizar la pregunta: tiene el acta de senador, pero no está muy presente. No siempre viene a votar. No te puedo decir qué tipo de parlamentario es porque solo ha hablado en los debates que solicitó el presidente Pedro Sánchez. Un líder que quiere ser de la oposición que no quiera debates de contraste sobre modelos de sociedad significa que a lo mejor no está tan preparado o no tiene nada que ofrecer. Las recetas que ha presentado son totalmente fallidas, como la bajada de impuestos que ha supuesto la salida de la primera ministra británica Liz Truss. Tenemos un problema porque no hay alternativa de gobierno ni una oposición homologable a la del Partido Conservador europeo.

P. Pese a ello las encuestas siguen otorgándole la victoria en las elecciones. ¿Les preocupa?

R. Las encuestas nos están diciendo que hay un punto de inflexión después del Debate del Estado de la Nación en que el PP baja y nosotros subimos. El ‘efecto Feijóo’ deja de ser tal en el momento en que empieza a decir lo que piensa o cuando la gente ya no sabe ni qué piensa. O directamente cuando la gente ve que ya no manda. No estamos preocupados, queda un año de legislatura con reformas importantes. Lo que nos ocupa ahora es aprobar los Presupuestos en tiempo y forma, que son los más sociales de la historia.

P. ¿Entiende que la ley trans haya generado tanta división, tanto dentro del PSOE como con los socios?

R. Cuando hay avances de derechos relacionados con las identidades son momentos importantes, pero también delicados. Porque la derecha y la extrema derecha, hagamos la ley que sea, la llevarán al Tribunal Constitucional. Dentro del PSOE hay opiniones diferentes, pero hay un objetivo: que sea una ley sólida para que nadie pueda rechazarla cuando vaya al TC.

P. ¿Reducir el delito de sedición significa ceder ante los independentistas?

R. No. Está en el plan normativo del Gobierno y el presidente ya lo planteó en su investidura en 2020. Está relacionado con la homologación de la tipificación de este delito al resto de Europa. No hay nada nuevo sobre la mesa, solo es una nueva excusa del PP para no cumplir la Constitución. Su portavoz, Cuca Gamarra, dijo solo 48 horas antes de romper el acuerdo que estaba hecho y que no tenía nada que ver una cosa con la otra. Están en una insumisión constitucional.

P. ¿España es un estado plurinacional?

R. Los debates nominalistas siempre encienden las pasiones.

P. Vivimos una época de pasiones.

R. Claro, por eso a los políticos nos toca apaciguarlas y hablar del seny. Tenemos un estado de las autonomías muy desarrollado y enormemente descentralizado. Todas piden las competencias que consideran y el Estado negocia. Esta es la realidad de un país plural y con muchos acentos.

P. ¿Es lo mismo el PSOE andaluz que el PSC?

R. El PSC es un partido diferente que tiene una historia diferente pero con un proyecto compartido. Yo soy de Barcelona y milito en un partido diferente al PSOE, que tiene un convenio de colaboración y una relación fraternal. Mismo proyecto, pero declinamos el socialismo en cada territorio.

P. ¿Francina Armengol está más cerca del PSC o del PSOE?

R. Es muy cercana al PSC en muchas cosas. Está consolidada como la líder de Balears que aporta la estabilidad que necesitaba esta tierra para regenerarse democráticamente. Destaco mucho su capacidad de diálogo y, en eso, me recuerda mucho a las democracias escandinavas, donde hay un proyecto de país y de territorio donde todas las fuerzas activas empujan hacia la misma dirección.

P. ¿Cómo valora el trabajo del senador autonómico Vicenç Vidal?

R. Él está en el grupo de la izquierda confederal y es un compañero más de la mayoría de izquierdas. Pero la defensa de los intereses de Balears vienen de los senadores del PSOE porque su gestión es más productiva. Aunque dialogamos y pactamos todo lo posible. Es muy simpático y nos reímos mucho.

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