El Consejo de Ministros ha aprobado la creación del Centro Nacional de Salud Pública, una asignatura pendiente de España desde 2011, cuando se aprobó la ley general de salud pública. Con un presupuesto inicial cercano a los 10 millones de euros y ubicado fuera de Madrid -otro compromiso institucional para descentralizar los organismos públicos-, su labor será la de analizar, decidir y coordinar estrategias e incluir la salud en todas las políticas públicas.

Tras el estallido de la pandemia por coronavirus, en 2020, el Gobierno de coalición se comprometió a establecer el nuevo organismo. Sin embargo, hubo que esperar a finales de 2021 para que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunciara, por fin, su creación. "Es un paso decisivo. A partir de ahora, estaremos mejor preparados para afrontar los futuros riesgos de la salud pública", ha comentado la titular de Sanidad en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Darias ha explicado que la nueva Agencia no solo analizará y luchará contra las enfermedades transmisibles, como el coronavirus, sino otras no transmisibles, como el cáncer o la diabetes.

La aprobación en el Consejo de Ministros es solo el primer paso. Antes de entrar en vigor, la norma legal por la que se creará la nueva Agencia debe ser, de nuevo, ratificada en una segunda vuelta por el equipo de Pedro Sánchez y después, debatida en el Congreso y el Senado.

El centro -que finalmente será una Agencia, como reclamaba la comunidad médica e investigadora, para disfrutar de la máxima independencia del Gobierno de turno- tendrá por objetivo anticiparse a nuevas crisis sanitarias y mejorar la red de vigilancia existente, ampliarla, e interconectarla con las comunidades autónomas y con otros organismos tanto nacionales como internacionales. Por ejemplo, la agencia europea HERA (Health Emergency Preparedness and Response Agency) y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés).

Independencia

Histórica reivindicación de la comunidad médica y científica, el futuro organismo es algo que ya existe en otros países de nuestro entorno, como Reino Unido, Francia y Alemania. Los expertos confían en que el Gobierno conceda autonomía de gestión al organismo, que no solo debe tener un enfoque sanitario sino global. “La crisis climática, la seguridad alimentaria, la obesidad y la posible aparición de nuevas enfermedades también tienen un pie en la salud pública”, asegura José Martínez Olmos, profesor de la Escuela andaluza de Salud Pública, en una entrevista en RNE.

El profesor Ildefonso Hernández, catedrático de Salud Pública de la Universidad Miguel Hernández (Elche, Alicante) añade que un organismo de semejante calibre conllevará grandes beneficios porque “realizará propuestas continuas para mejorar la salud de la población en todos los ámbitos: movilidad, contaminación o, por ejemplo, consumo de carne". 

Gestionar, coordinar y prever futuras epidemias será, lógicamente, otra de sus funciones. La gran pregunta es si la actual pandemia -que está dando, supuestamente, sus últimos coletazos-se hubiera podido gestionar mejor si España hubiera tenido activo el Centro Nacional de Salud Pública. La comunidad científica asegura que sí, que la capacidad de dar una respuesta coordinada y organizada hubiera sido mejor. Es decir, que la pandemia se hubiera gestionado de una manera más eficaz.

Hace semanas, durante una visita a la isla de La Palma, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ensalzó el papel de la ciencia y explicó que la futura institución permitirá a España estar "más preparado y protegido" ante futuras pandemias.

¿Fernando Simón?

No está clara todavía la ubicación de la nueva institución, aunque la Comunidad Valenciana tiene muchas papeletas. Tampoco está decidido quién lo dirigirá. En declaraciones a El Periódico de España, Joan Carles March, profesor de la escuela andaluza de salud pública, apuntaba la posibilidad de que fuera el médico e investigador Fernando Simón, que desde 2012 es el responsable del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad. Una vez que el nuevo Centro Nacional de Salud Pública sea una realidad, ese organismo quedaría bajo su paraguas. “No sé si el responsable será Fernando Simón, pero es una posibilidad porque ha tenido un papel fundamental en esta pandemia. En mi opinión, lo lógico sería hacer una convocatoria pública a la que se pudiera presentar quien quisiera", explicaba March.