El Gobierno de Argelia anunció este sábado que ha decidido llamar a su embajador en Madrid para "consultas con efecto inmediato" tras el "repentino cambio" de España sobre el Sáhara, según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores argelino.

La nota explica que el Ministerio de Exteriores argelino se ha visto "muy sorprendido" por el apoyo de España al proyecto de autonomía de Marruecos para el Sáhara, por lo que ha decidido "llamar a su embajador en Madrid para consultas con efecto inmediato".

Ayer viernes el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, afirmó que España considera que el plan de Marruecos de 2007 para una autonomía del Sáhara es "la base más seria, realista y creíble" para la "resolución" del conflicto.

"Muy sorprendido por este repentino cambio de posición del antiguo poder administrador del Sáhara Occidental", dice la nota del Ministerio argelino de Exteriores, que en consecuencia ha decidido llamar a su embajador en Madrid "para consultas con efecto inmediato".

El anuncio de la nueva posición de España lo hizo inicialmente el viernes el gabinete real marroquí y después fue confirmada por el Gobierno español, y supone un cambio en la postura de España respecto al futuro de Sahara, antigua colonia española.

Hasta ahora España defendía los acuerdos de la ONU para celebrar un referéndum en el Sahara, para determinar el futuro político de este territorio y del pueblo saharaui, que desde 1975 se encuentra en campamentos de refugiados en Argelia.

Críticas a la postura del Gobierno

La nueva posición española ha sido criticada también con dureza por la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y el Frente Polisario, que en un comunicado deploraron la "lamentable decisión" tomada por España al apoyar la iniciativa de autonomía propuesta en 2007 por Marruecos.

La reacción de Argelia llamando a consultas a su embajador en Madrid abre un nuevo capítulo en las relaciones entre España y Argelia, principal proveedor de gas a la península ibérica y que siempre ha apoyado la lucha del pueblo saharaui por la celebración de un referéndum de autodeterminación desde que en 1975 tropas marroquíes ocuparan un territorio que hasta ese año era una colonia española. 

Por su parte, juristas expertos en derechos humanos que participan en un encuentro sobre el Sáhara Occidental en Santander han denunciado que el Gobierno se aparta de la legalidad internacional apoyando el plan de autonomía de Marruecos para la antigua colonia española.

Consideran "especialmente preocupante" que unos momentos en los que en Europa "se abre paso el uso de la fuerza", se pretenda, a su juicio, "legitimar el producto de una ocupación militar" y su consecuencia, "la colonización y pretendida anexión de un territorio por parte de la potencia ocupante", añaden..

Relación España-Argelia

En cuanto a la relación estrictamente bilateral entre Argelia y España, Argel es el principal suministrador de gas natural a la Península en un momento delicado como el actual en el plano energético. Argel rompió relaciones diplomáticas con Rabat el pasado agosto y en noviembre procedió al cierre del Gasoducto Magreb-Europa (GME) que bombeaba gas hasta la península Ibérica a través de Marruecos.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, habló el pasado 6 de marzo con el presidente argelino, Abdelmayid Tebune, quien reiteró no solo el compromiso de su país con garantizar el suministro a España sino también la voluntad de Argelia de ayudar en lo posible, como socio fiable en materia energética que quiere ser, a los europeos, según indicaron fuentes gubernamentales.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, no quiso aclarar este viernes si Argelia ha sido informada de antemano sobre el cambio de posición del Gobierno, escudándose en que "la diplomacia requiere discreción", pero sí se ha mostrado convencido no afectará al suministro de gas a España por parte de este país. "Argelia ha demostrado repetidas veces que es un socio fiable", ha sostenido, asegurando que mantiene una relación "fluida" con su homólogo argelino.

No obstante, este es el segundo 'agravio' del Gobierno a Argelia en poco más de un mes después de que a principios de febrero anunciara que había accedido a la petición de Marruecos de ayudarle a garantizar su seguridad energética mediante la regasificación en España de Gas Natural Licuado (GNL) comprado por Rabat para su posterior envío a este país mediante el gasoducto GME.

Entonces, Argel ya advirtió de que en ningún caso España podría hacer llegar gas argelino a Marruecos. Está por ver ahora cómo reacciona el Gobierno argelino ante este giro, que por contra ha sido muy celebrado por Marruecos y que da por superada la crisis diplomática que desencadenó hace casi un año la acogida en España por motivos humanitarios del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.