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Y después, la sucesión en Galicia

Con el actual inquilino de Monte Pío, el PPdeG ha sido más presidencialista y personalista que nunca.

Feijóo saluda a Conde, con Tellado y Puy detrás, en una sesión del Parlamento gallego Xoán Álvarez

¿Si Feijóo releva a Casado, a Feijóo, quién lo sustituye? Esta pregunta empezaba ayer a circular por los corrillos del PPdeG. Los populares gallegos ven a Feijóo, dispuesto a hacer las maletas y se preguntan quién ocupará su puesto en la Xunta y al frente del PPdeG. No son pocos los que admiten que habrá tensiones, pero que al final todo se resolverá con el dedazo de Feijóo.

Aunque el presidente de la Xunta desde 2009 nunca barajó permanecer tantos años en el cargo, con dos mandatos ya le parecía suficiente, lo cierto es que nunca enfocó el tema de su sucesión, y en el PPdeG nadie ve un delfín claro. El protagonismo siempre ha girado en torno a la figura de Feijóo, que eclipsa al resto. El PPdeG, con el actual inquilino de Monte Pío, ha sido más presidencialista y personalista que nunca. No pasaba con Manuel Fraga, donde los barones territoriales tenían su cuota de poder y su protagonism o mediático.

De entrada, si Feijóo deja la Xunta solo un diputado del PP puede relevarle. De los miembros de su Gobierno, solo tienen escaño los dos vicepresidentes: Alfonso Rueda y Francisco Conde. Ningún conselleiro tiene acta de parlamentario. ¿Qué otros diputados no hay que olvidar en esta cuestión de la sucesión? El portavoz parlamentario, Pedro Puy, y los presidentes provinciales del PP en A Coruña y Lugo, Diego Calvo y Elena Candia. También está el secretario xeral del PPdeG, Miguel Tellado.

El elegido tendría más de dos años para hacerse con el cargo y tantear sus opciones como candidato a la Xunta, testando su gestión ante la opinión pública y entre los suyos.

Feijóo también tendría que afrontar antes o después su relevo al frente del PP gallego. Fue reelegido en julio del año pasado por cuatro años más, por lo que habría que convocar un congreso extraordinario.

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