-Lunes, 22 de noviembre. La portavoz de Junts per Cataluña reclama una reunión urgente al más alto nivel por el (enésimo) desacuerdo, esta vez sobre los presupuestos. Casi dos meses después, no consta que se haya producido el encuentro ni -lo más importante- que hayan habido cambios en la desunión estratégica del soberanismo, que sigue como gran asignatura pendiente de este espacio político en esta reapertura del curso tras las vacaciones. Los actores implicados asumen la evidencia al tiempo que se lanzan invectivas más o menos directas sobre qué hacer para caminar hacia la independencia.

El 'president', Pere Aragonès, ha planteado ya públicamente la necesidad de abordar un plan B si la mesa de diálogo con el Gobierno no da frutos. En Junts aprovechan para lanzar dardos en privado y en público, mientras que la CUP se ha instalado en la reclamación de un nuevo referéndum de independencia, que los otros dos socios rechazan. Ante esta situación, las entidades sociales del independentismo tratan sin éxito de poner aceite en los mecanismos de coordinación.

Junts sondea escenarios

Junts es la que más ha lanzado, en público y en privado, globos sonda sobre escenarios de futuro. De puertas adentro, diputados de la formación apuestan por acortar el período de dos años de margen que se ha dado a la mesa de negociación. Estas voces consideran que el pacto de ERC con los 'comuns' para los presupuestos catalanes ha abierto la veda para poder replantearlo todo. La presidenta del Parlament, Laura Borràs, de JxCat, no desaprovecha la ocasión para exigir concreciones e incluso para proponer que el eventual regreso del 'expresident' Carles Puigdemont sirva para "culminar la independencia", según ha afirmado a 'El Nacional', sin detallar cómo.

ERC en cambio mantiene el rumbo previsto, sin desatender al flanco de los más radicales, por lo que Aragonès ha recordado que el pacto con JxCat incluye también buscar alternativas de futuro. Pero los republicanos no han mostrado ni un síntoma de nerviosismo ante los movimientos de sus socios y mantienen el plan previsto. Mientras, las reuniones urgentes al más alto nivel siguen esperando. Y los frutos de estas citas, todavía más.