La portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, ha espetado este jueves que el PP no deroga las leyes LGTBI, punto que se incluye en la Ley de Igualdad presentada por su partido que se debate hoy, porque están "acobardados" y la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, la acusa de querer "imponer desde una minoría".

En la sesión de control del Pleno de la Asamblea, Monasterio ha tomado la palabra para criticar que Ayuso aprobase estas normativas LGTBI, "de privilegios de género" que arrebatan "a todos los españoles el derecho a la presunción de inocencia", cuando era diputada rasa. Además, también ha criticado que como alternativa a su derogación les hayan presentado una reforma de las leyes "donde dice que un hijo puedo denunciar a un padre por la ley de violencia de género por una falta de respeto sin presunción de inocencia".

"Usted no defiende la libertad para todos. Defiende los privilegios de algunos a los que usted le tiene miedo y como les tiene miedo en cuanto les dicen 'nos van a quitar derechos', usted da un pasito para atrás acobardada y dice: no, no, no voy a derogar las leyes. A ustedes siempre les pasa lo mismo, que dicen mucho comunismo o libertad pero cuando tienen que luchar contra el totalitarismo se quedan mudos, acobardados y mirando al suelo como están sus diputados", ha subrayado.

Responsabilidad

Por su parte, la dirigente madrileña ha espetado a Monasterio que ella tiene "la suerte y el privilegio de permitirse decir cualquier cosa porque no gobierna" y ella ha defendido que como presidenta tiene que asumir "amplias responsabilidades" en la Comunidad, a la que debe dotar "de estabilidad, normalidad y de total convivencia".

"Muchas de las acusaciones que usted me lanza yo no me las puedo permitir y no es en lo que estoy. Estoy de acuerdo con que salgan adelante estas leyes, no se en cuantas ocasiones lo voy a decir, en lo que no estoy de acuerdo es con las formas", ha dicho.

Así, ha incidido en que en la manifestación contra la derogación de leyes LGTBI a ella la llamaron "fascista" pero considera que las formas con las que Monasterio trae a la Asamblea las cosas "no son las oportunas". Esto, a su parecer, no se hace "ni ofendiendo ni llevando del ronzal a los demás" cuando, además, tienen "65 escaños".

"En democracia también hay que representar a los ciudadanos y hay que respetar esa proporción. Ustedes traen aquí una ley que se supone que es para la igualdad y la intentan imponer desde una minoría parlamentaria, en la que no han buscado ni siquiera el consenso con nosotros", ha declarado.

En este punto, ha repetido que "estas leyes" no consideran que tengan que ser "eliminadas pero sí que pueden ser mejoradas", para lo que tienen representación parlamentaria suficiente. Para Ayuso, esta normativa la han intentando "meter con calzador en un momento muy delicado para todos", cuando Madrid necesita "estabilidad y convivencia".

"Podemos modificar las cosas pero no tirando a las cabeza las leyes ni los unos ni los otros. Ni estamos en listas de fascistas para ser señalados como hace la ultraizquierda con estas banderas ni tenemos que intentar estar sometidos por una ley que, por cierto, traía profundas deficiencias", ha sostenido, para a renglón seguido desvelar que hablaba "de una policía autonómica" que no existe.

Para Ayuso, "la igualdad no se impone por una ley si es nefasta" o si no está bien "articula". "Consideramos que este debate debe seguir produciéndose con total normalidad en el parlamento pero no creo que ni a un lado ni al otro estén haciendo las cosas de manera correcta. La inmensa mayoría de los ciudadanos no están en esto. Yo entiendo lo que me dice con esta dictadura en la que nos intentan a los que no somos como la izquierda radical someter... si soy la primera que estoy siendo señalada todos los días", ha zanjado.