Las autoridades de Marruecos han reforzado en los últimos días el lado que conecta su zona de costa con la playa del Tarajal, por donde los pasados días 17 y 18 de mayo accedieron a Ceuta unas 12.000 personas.

Según han informado a Efe fuentes policiales y ha podido comprobar Efe, la Gendarmería marroquí ha procedido a reforzar su lado del espigón fronterizo con la instalación de nuevas concertinas. Estos nuevos elementos tienen como objetivo fundamental dificultar el acceso a la zona por parte de los marroquíes que intenten acceder a nado a Ceuta o bien a través del espigón fronterizo del Tarajal.

Marruecos ha instalado este refuerzo en las inmediaciones de la zona conocida como "tierra de nadie", un espacio situado entre la frontera española y la marroquí.

El vallado con concertinas se extiende hasta la misma línea de playa por donde a mediados del pasado mes de mayo entraron andando miles de personas que posteriormente consiguieron acceder hasta Ceuta.