El extesorero del PP Luis Bárcenas ha declarado esta tarde como testigo ante el juez Manuel García-Castellón en el 'caso Púnica' que entregó en 2008 junto a su jefe en la tesorería del partido, el fallecido Álvaro Lapuerta, un total 60.000 euros a la entonces presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, de un constructor, informaron a El Periódico de Catalunya fuentes jurídicas. Como ya anunció su abogado, Gustavo Galán, en el juicio de la caja b del PP, Bárcenas ha dicho no tener pruebas documentales de su nueva acusación contra la expresidenta madrileña más allá de su propio testimonio.
Según ha explicado al juez, Lapuerta y él le entregaron a Aguirre en un sobre el dinero que procedía de la constructora Ploder, cuyo entonces presidente, Luis Gálvez, ya aparecía entre los empresarios que realizaron donaciones al PP, según consta en las anotaciones manuscritas de Bárcenas que se llamaron sus 'papeles' y en la que dejó reflejada la contabilidad en b del partido. Las mismas fuentes negaron que, pese a lo delicado para su propia situación que podrían ser sus palabras, el magistrado procediera a cambiarle la condición de testigo por la de imputado.
Se trata de la segunda comparecencia que realiza Bárcenas en la Audiencia Nacional, aunque en la anterior, que realizó por videoconferencia desde la cárcel en la que cumple condena por el 'caso Gürtel', no debía declarar en relación con la financiación del PP, sino sobre el operativo "parapolicial" orquestado desde el Ministerio del Interior en 2013 para intervenirle la información comprometedora para el PP que guardara. Es lo que se llamó 'operación Kitchen'.
Entregar los 22 millones
Hasta hoy la única demostración de su anunciada colaboración había sido comunicar a la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que ponía a su disposición los 22 millones de euros que tenía bloqueados en cuentas suizas, lo que evitará al tribunal de la 'Gürtel' tener que cursar una comisión rogatoria para repatriar ese dinero.
El extesorero del PP fue trasladado desde la cárcel de Soto del Real (Madrid) a la Audiencia Nacional a las 16.00 horas para declarar como testigo ante el juez que instruye el 'caso Púnica', cuya una de sus piezas es la relativa a la presunta financiación irregular del PP de Madrid, en la que están imputados los expresidentes regionales del PP Esperanza Aguirre, Ignacio González o Cristina Cifuentes. El único expresidente de la comunidad que se libra es Alberto Ruiz-Gallardón.
Este mismo miércoles se supo que le había sido concedido su primer permiso penitenciario, según la propuesta de Instituciones Penitenciarias, lo que desde el PP fue contestado con un tuit con el siguiente texto "pacta sunt servanda". Sin embargo, la concesión del permiso no plantea problema teniendo en cuenta que ya ha cumplido cuatro años y medio de prisión de un máximo de cumplimiento fijado en 12 años, por el triple del delito más grave por el que se le condenó.
La citación de Bárcenas obedece al escrito que envió a finales de enero a Anticorrupción anunciando su "voluntad" de colaborar con la justicia, para aclarar la caja b del PP y la presunta financiación irregular del partido en Madrid. Como excusa a por qué no lo había hecho antes esgrimió la supuesta promesa que le llegó desde el partido de su esposa, Rosalía Iglesias, no entraría en prisión.
El juicio de la caja b se ha retrasado, por la COVID que padece el que durante un año fue número dos de Bárcenas, Cristóbal Paéz, por lo que el 'caso Púnica' se ha convertido en la primera oportunidad de Bárcenas para demostrar lo que anunciaba en su escrito, en el que aseguraba que el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, destruyó la copia de la contabilidad paralela que le había dado sin saber que él guardaba una copia.
