El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha alertado de que conviene tener “muy presente” la fecha del 23F porque permite celebrar una “democracia plena” que garantiza los derechos y libertades, y ha lamentado que la unidad de entonces se eche ahora en falta en un momento de crisis por la pandemia.

Así lo ha afirmado este lunes en un acto en la sede del PSOE con motivo del 40º aniversario del intento de golpe de Estado del 23F que se conmemora mañana, en el que también ha intervenido la vicesecretaria general y portavoz socialista en el Congreso, Adriana Lastra.

Ábalos sostiene que “la derecha” ha dado “la espalda” a España, aprovechado la pandemia para “dividir y debilitar” y pactado con los “enemigos declarados de la democracia”, por lo que ahora está “recogiendo los frutos podridos de tanta indignidad” tras las elecciones catalanas.

El también secretario de Organización del PSOE considera que la derecha no se ha limitado a “acosar al Gobierno”, sino que “ha atacado a la propia democracia” al “deslegitimar las instituciones”, cuestionar resultados electorales y “maniobrar en Europa” para impedir que llegaran los fondos para la reconstrucción.

“Se han aliado con los enemigos declarados de la democracia, esos a los que les gustaría gritarnos de nuevo que nos estemos quietos y que nos echemos al suelo. Son sus socios. Han blanqueado la extrema derecha y les han puesto una alfombra roja a cambio de mantener el poder en comunidades y ayuntamientos”, ha recriminado, sin citar el nombre de ningún partido.

Además, el ministro considera que la democracia es “una fuerza muy poderosa”, pero que a la vez exige “cuidados permanentes” porque también es “de una gran fragilidad”, y reprocha que con algunas de sus prácticas la derecha cuestione la calidad del Estado de Derecho.

“No sé de qué se alarman frente a otras afirmaciones sobre el relativismo de nuestra democracia, cuando ellos mismos en el Foro Europeo han planteado las debilidades de nuestra calidad democrática”, se ha preguntado.

Además, para Ábalos la democracia “no es una pieza de museo”, sino “algo vivo” que se debe “legitimar siempre” y que se construye “con más democracia”.

“Por el contrario, la violencia es su antítesis, atasca su curación de libertades y la desangra”, ha sentenciado el ministro.