El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado este lunes que la región ya está "en disposición de modular las medidas" frente a la COVID-19 y que esta semana se abordarán cambios, por lo que "el fin de semana que viene será ya distinto, con apertura en comercios de más de 300 metros cuadrados y hostelería".

"El escenario empezará a cambiar a partir del fin de semana", ha avanzado García-Page, que se ha pronunciado así durante su intervención en un acto en la empresa Airbus Helicopters, en Albacete.

Ha defendido que las medidas en vigor en este momento, como el cierre total de la hostelería -excepto para la comida a domicilio- y los centros comerciales, eran "duras" pero "necesarias" y que siempre prevalecerá en las mismas el objetivo de "salvar vidas", por lo que no ha descartado volver a endurecer las mismas si los datos vuelven a empeorar.

"En momentos de crisis hay que tomar decisiones duras y hay que hacerlo con un criterio muy claro", ha subrayado el presidente regional, que ha indicado que las decisiones siempre se han tomado teniendo en cuenta el criterio de los profesionales sanitarios.