El consejero madrileño de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha afirmado este miércoles que, si la evolución de la pandemia se mantiene como hasta ahora, la Comunidad no se plantea establecer "ningún tipo de restricción" después del 14 de diciembre para permitir las entradas y salidas de la Comunidad.

En declaraciones en Telecinco, el consejero ha señalado que, si los datos de contagios lo permiten, el cierre perimetral de la región entre el 4 y el 14 de diciembre será "el último" y después de esta fecha no se plantea establecer "ningún tipo de restricción de cara al futuro" en este sentido.

Ruiz Escudero ha señalado que la movilidad de aquellos que viven, trabajan o estudian en Madrid y que tienen la familia fuera de la región es uno de los puntos que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso está estudiando a la hora de fijar las medidas de cara a la Navidad.

Unas fechas en las que es "impensable" que la gente no vaya a reunirse con sus familias, y de ahí que la propuesta de restricciones de cara a las comidas y cenas vaya más allá que la que ha realizado el Gobierno de la nación.

Madrid propone que los días 24, 25 y 31 de diciembre y los días 1 y 6 de enero puedan reunirse hasta 10 personas que no pertenezcan a más de tres unidades de convivientes distintas, unas cifras que se han propuesto "pensando en los mayores", imaginando una situación de familia media en la que se junte un matrimonio de abuelos con dos hijos y las respectivas familias de éstos últimos.

Y sobre la ampliación del horario de toque de queda que plantea Madrid (de 1.30 a 6.00 frente a la propuesta de 1.00 a 6.00 del Gobierno), Escudero la atribuye a que las distancias en Madrid son "bastante largas" y esa media hora de más permitiría "favorecer que las salidas de las cenas se produzcan de manera más natural".

Con todo, ha insistido en que este "pequeño margen" para las celebraciones familiares podrá llevarse a cabo siempre y cuando la tendencia a la baja de los datos de contagios se mantenga.

Respecto a la San Silvestre Vallecana, la carrera popular que cada año reúne a unas 10.000 participantes en Madrid la tarde del 31 de diciembre, el consejero ha afirmado que la Dirección General de Salud Pública está estudiando si es conveniente, porque, aunque se celebre al aire libre, una concentración de tantas personas "no va en la línea que se está marcando la Consejería" para contener el avance del virus.

"Es complicado dar una autorización para un evento de esa dimensión pensando en lo que están viviendo las familias", ha apuntado.

Previamente, en declaraciones en Telemadrid, el consejero ha confiado en que se dé "cierta flexibilidad" por parte del Gobierno de la nación para que las comunidades autónomas adapten las medidas restrictivas de cara a las fiestas de Navidad y que se tenga en cuenta, como hace siempre el Ministerio, la situación epidemiológica y hospitalaria en ese momento.

Escudero ha confiado en que las regiones puedan exponer al Gobierno sus planteamientos este miércoles en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, aunque esta cuestión no figura en el orden del día.