El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha firmado un decreto que ordena prorrogar el confinamiento perimetral de las tras capitales de la comunidad hasta el próximo día 30 para hacer frente al aumento de la mortalidad a causa del coronavirus y al nivel de ocupación hospitalaria.

La decisión, que mantiene las medidas restrictivas incluidas en un decreto anterior fechado el pasado 21 de octubre con un límite de duración de treinta días, tiene como objetivo mantener la limitación de entradas y salidas de personas en las ciudades de Zaragoza, Huesca y Teruel.

Solo se aplican excepciones en los casos de asistencia a centros sanitarios, cumplimiento de obligaciones laborales, desplazamientos a centros docentes, retorno al lugar de residencia habitual, cuidado de mayores, exámenes, cuidado y atención de personas mayores o con discapacidad u otras causas de fuerza mayor.

Este confinamiento se realiza mientras la comunidad autónoma de Aragón, también por decreto de su presidente, se mantiene en un nivel de alerta 3 agravado, el más restrictivo de los definidos legalmente, que incide de forma especial en los servicios de hostelería y establece un toque de queda desde las 23.00 horas.

Unas restricciones que, en lo que respecta a la hostelería, solo permiten el uso de las terrazas de bares, cafeterías y restaurantes hasta las 20.00 horas.

La motivación del decreto de prórroga del confinamiento perimetral señala que la nueva ola de casos que se produjo en octubre obligó a las autonomías a acordar restricciones severas.

En Aragón, tras alcanzarse un pico de 589 casos en la semana 44 de la pandemia, las medidas adoptadas han permitido moderar este crecimiento hasta los 311 en la semana 46, una situación favorable que también se ha reflejado en la reducción a menos del 15 % del porcentaje de positividad en las pruebas realizadas.

El decreto advierte, sin embargo, que la mortalidad sigue en una dinámica creciente, mientras que el alto nivel de hospitalización se mantiene.

Otros indicadores esgrimidos en la resolución son la ocupación de más del 50 % de las camas UCI de la comunidad y la superación del 10 % de positividad en las pruebas diagnósticas.

"Cuantitativa y cualitativamente, los indicadores establecidos indican inequívocamente la existencia de riesgos que hacen necesario el mantenimiento del confinamiento perimetral de Zaragoza", subraya el decreto, que también considera necesaria la medida en las ciudades de Huesca y Teruel.

Añade que en las tres capitales se acreditan "suficientemente riesgos elevados, de manera que se cumplen los requisitos epidemiológicos, sanitarios y de salud pública para acordar el mantenimiento, conforme a la normativa básica estatal y aragonesa, de la medida de confinamiento perimetral".

En concreto, el decreto establece en su primera disposición que "se restringe la entrada y salida de personas a partir de las 00:00 horas del 21 de noviembre de 2020 y hasta las 24:00 del día 30 de noviembre de 2020 en los municipios de Huesca, Teruel y Zaragoza".