Vecinos de Alcanar (Tarragona) interrogados por los Mossos d'Esquadra declararon que no sospecharon que las personas que vivían en la casa de este municipio que explosionó el 16 de agosto de 2017 estaba ocupada por los terroristas que atentaron al día siguiente en Barcelona y Cambrils.

La Audiencia Nacional ha reanudado el juicio de dos presuntos integrantes de la célula yihadista, Mohamed Houli y Driss Oukabir, y un supuesto colaborador, Said Ben Iazza, acusados de participar en la preparación de los atentados de Barcelona, mediante un atropello masivo con una furgoneta, y Cambrils (Tarragona), con cuchillos y un hacha, que dejó 16 muertos y 140 heridos.

Este martes han testificado 17 mossos d'esquadra que se personaron en la casa de Alcanar tras la explosión ocurrida la noche del 16 de agosto de 2017, de los que 11 han explicado las heridas que sufrieron cuando durante las tareas de desescombro y de recogida de objetos se produjo una segunda explosión sobre las cinco de la tarde del día siguiente.

Se da la circunstancia que esta segunda explosión tuvo lugar cuando Younes Abouyaaqoub cometía sobre la misma hora el atropello múltiple con una furgoneta en Las Ramblas de Barcelona.

Mossos d'esquadra que han declarado en sesiones anteriores han mantenido que los terroristas preparaban en la casa de Alcanar artefactos para cometer atentados y que sus objetivos iniciales eran el Nou Camp y la Sagrada Familia de Barcelona así como en la Torre Eiffel de París, pero la explosión en dicho inmueble hizo que improvisaran los ataques en Barcelona y Cambrils. Younes Abouyaaqoub fue abatido por los mossos d'esquadra el 21 de agosto en una carretera de Subirats (Barcelona).

Los primeros mossos que se personaron en la casa de Alcanar tras la explosión de la noche del día 16 han manifestado este martes que cuando llegaron desconocían que la misma pudiera tener un origen terrorista.

Han añadido que tras la explosión procedieron a buscar indicios en el lugar que pudieran esclarecer las causas y que ya al día siguiente, el 17 de agosto, fue utilizada una excavadora para ir retirando escombros hasta que se produjo una segunda fuerte explosión sobre las cinco de la tarde.

Se barajaba una explosión de gas

Uno de los dos bomberos de la Generalitat de Cataluña que también han testificado ha comentado que cuando él se incorporó al lugar para ayudar a los mossos d'esquadra la tarde del día 17 había aún mucha confusión y se barajaba la posibilidad de que el suceso de la noche anterior se hubiera debido a una explosión de gas.

Tantos los mossos como los dos bomberos han relatado las heridas que sufrieron y las secuelas que aún padecen por lo que reclaman ser indemnizados, aunque algunos de ellos ya han recibido algunas cantidades del Ministerio del Interior.

Uno de los mossos d'esquadra ha explicado que en la tarde del día 17 cuando se encontraban buscando indicios de lo ocurrido en la casa de Alcanar con la excavadora se produjo una fuerte explosión. "Salí corriendo, me encontré a un bombero y a mi jefe y después perdí el conocimiento por lo que me trasladaron el helicóptero al hospital de Tarragona", ha manifestado.

Ha añadido que ya no puede volver a trabajar porque le ha sido declarada la invalidez permanente total y que sufre trastorno por estrés postraumático.

Los agentes encargados de la investigación han relatado que entre los escombros de la casa de Alcanar se encontraron se restos humanos.

Según la Fiscalía a consecuencia de la explosión fallecieron el imán de Ripoll (Gerona) Abdelbaki Es Satty, en torno al cual supuestamente se formó la célula yihadista, y otro presunto terrorista y resultó herido el acusado Mohamed Houli.

Los mossos han explicado también que encontraron entre los restos de la casa de Alcanar diversa documentación como los permisos de conducir de Abdelbaki Es Satty y de Mohamed Houli y un contrato de trabajo de Younes Abouyaaqoub, entre otros documentos de otros miembros de la célula, cinco de los cuales fueron abatidos por los mossos en su ataque en Cambrils.

Han añadido que igualmente hallaron bidones con sustancias utilizadas para explosivos y alrededor de un centenar de bombonas de butano.