El magistrado vallisoletano Fernando Valdés ha renunciado a su puesto en el Tribunal Constitucional (TC) a consecuencia del procedimiento que tiene abierto en el Tribunal Supremo, que le ha procesado recientemente por un delito de malos tratos en el ámbito familiar.

Fuentes del tribunal de garantías informaron de que Valdés presentó ayer su renuncia al presidente del TC, Juan José González Rivas, y que este la aceptó. La renuncia fue comunicada también al magistrado del Supremo Andrés Martínez Arrieta, que es el instructor que ha investigado el episodio por el que Valdés fue detenido el pasado mes de agosto, cuando unos testigos alertaron a unos agentes de una fuerte discusión con su mujer en su domicilio de Majadahonda (Madrid).

Un mes después de abrir causa y tras escuchar una serie de declaraciones, el magistrado del Supremo acordó la semana pasada procesar a Valdés por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar al ver indicios de criminalidad contra él.

La salida del Valdés -cuyo puesto era uno de los cuatro pendientes de renovación- implica que el tribunal trabajará con once magistrados, de forma que pierde apoyos el sector progresista, al que pertenecía este magistrado.