El Congreso investigará finalmente la 'operación Kitchen. El PSOE, tras titubear en las últimas horas, registrará con Unidas Podemos, en las próximas horas, una solicitud conjunta en el Congreso para que se cree una comisión de investigación sobre el caso. Esa petición, previsiblemente, saldrá adelante ya que cuenta con el consenso de los grupos minoritarios. Incluso Ciudadanos no se niega en redondo a que se investigue al PP, aunque quiere ver antes los "términos" del escrito.

El texto, de hecho, aún no está listo. Los socialistas están aún redactando, conjuntamente con sus socios, la petición que se llevará a la Cámara, y que se registrará formalmente "este jueves o viernes", según indicaron a El Periódico de Catalunya fuentes de la cúpula del partido. Además, PSOE y Unidas Podemos enviarán la propuesta a los demás grupos, por si quieren adherirse a ella. Fuentes del grupo morado indican, de hecho, que ya se está hablando con ERC, promotora de la iniciativa. De cerrarse el texto esta semana, llegaría a tiempo para que la Mesa del Congreso lo califique en su reunión del próximo martes.

Fue por tanto ERC el primer partido en anunciar este martes que varias formaciones como JxCat, EH Bildu, Más País, Compromís o el BNG estaban dispuestos a investigar al PP por el presunto espionaje a su extesorero Luis Bárcenas, por el que podrían ser imputados los exministros María Dolores de Cospedal y Jorge Fernández Díaz y el exmarido de la primera, el empresario Ignacio López del Hierro.

Los grupos minoritarios se movían a raíz de las informaciones de los últimos días a partir del levantamiento del secreto del sumario de la 'operación Kitchen'. En él aparecen conversaciones entre Fernández Díaz, su secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y mandos policiales que apuntarían al montaje de una estructura parapolicial para destruir las pruebas que pudiera tener Bárcenas.

"Qué no habrán hecho con otros"

"Si se hacían esto entre ellos, qué no habrán hecho para con otros, sobre todo en el sector del independentismo y el republicanismo catalán, con Unidas Podemos o con cualquier disidencia política al denominado régimen de 1978", apuntó el portavoz republicano, Gabriel Rufián. Revelaciones "extraordinariamente graves", señaló Íñigo Errejón, líder de Más País, para quien de confirmarse significaba que el PP en el Gobierno usaba estructuras públicas y sectores de las Fuerzas de Seguridad del Estado para "espiar y robar documentos, hostigar o chantajear".

En un primer momento, la posición del PSOE no fue cien por cien contundente. La portavoz parlamentaria, Adriana Lastra, señaló que no descartaba apoyar la petición, aunque advirtió de que su grupo quería estudiar "bien" el informe de la Fiscalía y del sumario, e insistía en que Pablo Casado debía dar explicaciones, tesis que secundó la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero. Pero este miércoles el giro era completo: es el PSOE el que se decide a presentar la solicitud, de la mano de Unidas Podemos, para a partir de ahí buscar el respaldo mayoritario.

El PNV ya se mostró ayer proclive. Este miércoles, el PSOE trasladó al grupo nacionalista su intención de presentar el escrito y ambas partes quedaron en seguir hablando para ir conociendo la redacción del texto. La formación 'jeltzale' no se pronunciará hasta conocer la literalidad de la petición, aunque avanza que el 'caso Kitchen' es "grave" y requiere de "explicaciones" por parte del PP. La duda es, en consecuencia, si finalmente habrá una solicitud conjunta o bien los minoritarios respaldarán la impulsada por el PSOE y Unidas Podemos.

¿Qué hará Ciudadanos? Es la incógnita. Como este martes indicaba el portavoz adjunto del grupo, Edmundo Bal, los naranjas nunca se oponen a que se investiguen hechos de posible corrupción de "cualquier partido", y eso incluye a Podemos. Pero esa última vía está cegada por ahora, porque el PSOE frenó este martes la comisión de investigación en la Junta de Portavoces, por lo que esa solicitud de la oposición no llegará siquiera a debatirse en el pleno.

Los liberales indican que no han visto "los términos" del papel sobre el que trabajan socialistas y podemistas, y cuando lo lean, decidirán. El PP, naturalmente, se opone, porque liga las pesquisas judiciales al pasado, a la época de Mariano Rajoy.