Aragón podría sancionar con hasta 3.000 euros no llevar mascarilla en su propósito de endurecer las multas al máximo de conductas que para el presidente aragonés, Javier Lambán, son de una "manifiesta irresponsabilidad".

En la apertura del curso escolar en el CEIP Tío Jorge de Zaragoza, Lambán ha destacado que en general los aragoneses "se están comportando", pero hay sectores de la población que con su conducta están poniendo en riesgo su salud y la de los demás.

Tras la vuelta a la normalidad de todo el territorio aragonés el viernes y ante algunas concentraciones de personas en el fin de semana en áreas de ocio, como el Tubo de Zaragoza, el presidente ha reiterado que su Gobierno estudia el endurecimiento de las sanciones, como ya prevén las leyes sanitarias para conductas irresponsables como en su opinión se están produciendo en el ocio familiar y festivo.

Lambán se ha referido más que a la situación de Zaragoza, donde las cosas "funcionan razonablemente bien", a la organización de actos espontáneos en coincidencia con las fechas de fiestas canceladas en los pueblos que están produciendo brotes "perfectamente evitables" y van a obligar a tomar medidas en algunos municipios.

Así, ha indicado que se van a activar las sanciones endureciéndolas al máximo, de forma que en determinadas circunstancias no llevar mascarilla pueda suponer una sanción de 3.000 euros y la organización de un botellón, hasta 60.000 euros.

"No nos va temblar la mano para aplicar este tipo de sanciones", ha enfatizado Lambán, ya que estas conductas son "absolutamente condenables y merecen sanciones muy duras", dado el dolor y trastorno que está causando la propagación del virus en todas los ámbitos.

Ha subrayado que hasta ahora se han producido muchas denuncias y está prevista la aplicación de sanciones, pero el objetivo es endurecerlas, ya que por no llevar mascarilla puede ser de entre 100 y 3.000 euros y no es partidario, ha dicho, de que haya una sanción "testimonial", tampoco en el caso de las reuniones con más personas de las permitidas o los botellones.

El presidente ha destacado que los servicios jurídicos del Gobierno de Aragón ya trabajan en la cuestión, y en principio no serán necesarias grandes modificaciones de la legislación vigente, por lo que espera que las sanciones estén listas para su aplicación "en muy pocos días".

Lambán ha apuntado que seguirá en contacto con los alcaldes al ser fundamentales para que las medidas que se aplican sean eficaces y ha apelado al control de las policías locales en el uso de las mascarillas.

"No podemos permitir que el esfuerzo inmenso que ha hecho este verano la sanidad aragonesa" y de muchos otros profesionales para reconducir los picos epidemiológicos "se dilapide" por la conducta de determinados sectores de la población que por ocio nocturno o familiar "expanden el virus con una frivolidad" que le parece "incomprensible e inaceptable".