El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este sábado que el uso de mascarillas en el transporte público será obligatorio desde este próximo lunes, 4 de mayo, cuando empieza la fase 0 del plan de desescalada.

Sánchez ha hecho este anuncio en la rueda de prensa ofrecida este sábado, la primera jornada en que se ha permitido a los españoles salir a pasear o hacer deporte, una comparecencia en la que ha avanzado que para favorecer el cumplimiento de la norma se repartirán seis millones de mascarillas en los principales nudos de transporte.

Además, el presidente del Gobierno ha explicado que se facilitarán otros siete millones de mascarillas a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y otro millón y medio a Cáritas y Cruz Roja.

Otras medidas para la fase 0

Sánchez ha apuntado otras medidas concretas que se pondrán en marcha este próximo lunes como consecuencia de la fase 0 de la desescalada.

Los restaurantes y cafeterías podrán abrir para que sean los ciudadanos los que puedan recoger en el propio local los pedidos. Estos se realizarán mediante llamada telefónica e internet y se establecerá un sistema preferente de reparto para las personas mayores o con dependencias.

Los comercios y locales de servicio que pueden abrir desde el lunes, entre los que ha citado librerías, ferreterías, peluquerías, talleres de arreglo de ropa o de calzado podrán atender con cita previa y a un único cliente por cada trabajador. Se establecerán horarios de atención preferente a mayores de 65 años que coincidirán con sus horarios de paseo, de 10 a 12 del mediodía y de 19 a 20 horas.

También abrirán al público los archivos, a los que podrán acudir los ciudadanos con independencia de que la documentación pueda ser requerida también por internet.

A partir del lunes también se autorizan los entrenamientos para los deportistas profesionales que serán individuales y sin límite de tiempo dentro de la provincia. Los deportistas paralímpicos podrán ir acompañados.

La movilidad de los ciudadanos se incrementará de forma especial en cuatro islas -Formentera, Hierro, La Graciosa y La Gomera- que el próximo lunes comienzan la desescalada directamente en la fase 1. En dichos lugares se permitirá, tal y como establecen las disposiciones referidas a dicha fase, el contacto social en grupos reducidos, además de los viajes de los convivientes en el mismo vehículos privado (con posibilidad de ocupar la totalidad de las plazas del vehículo), así como la apertura de terrazas y equipamientos culturales con las restricciones de aforo previstas.

Prórroga del estado de alarma

Además, Sánchez ha confirmado este sábado que pedirá al Congreso el próximo miércoles autorización para prorrogar por cuarta vez y otros quince días más el estado de alarma.

En una comparecencia de prensa en La Moncloa, Sánchez ha subrayado que todos los indicadores demuestran que la enfermedad "está siendo controlada" y que el estado de alarma "en consecuencia funciona", pero ha advertido de que en el periodo de desescalada "será aún más importante" el "control y la responsabilidad social y personal".

"Debemos aferrarnos a determinadas certezas; sabemos que el estado de alarma ha funcionado y sabemos que sigue siendo necesario", ha dicho el jefe del Ejecutivo, quien ha recalcado que el Gobierno está centrado en ganarle la batalla al coronavirus "sin perder el tiempo en reproches a nadie".

Sánchez ha advertido de que "no hay plan B" al estado de alarma y por eso ha apelado a la responsabilidad de todos los actores políticos para que se mantenga esa situación, cuya nueva prórroga debe aprobar el Congreso el miércoles.

Ante la amenaza de varios partidos de no apoyar una nueva prórroga o las reticencias de algunos Gobiernos autonómicos a que dicho estado se mantenga, Sánchez ha dicho en rueda de prensa que todos deben ser conscientes de que la alarma es un "instrumento eficaz para vencer al coronavirus" y todos los países europeos lo están utilizando.

Es un instrumento además, ha recalcado, que ampara a distintos colectivos para protegerles ante el parón económico.

"Es importante ser conscientes del impacto que podría tener no solo en la salud pública sino también económico y social" que no se aprobara la prórroga, ha dicho Sánchez, quien ha insistido en que no piensa polemizar con administraciones o partidos pero ha insistido en que todos deben "arrimar el hombro" e ir "todos a una".

Sánchez ha señalado que si el estado de alarma estaba justificado cuando se decretó por primera vez para ordenar el confinamiento "cómo no va a seguir estándolo ahora" con todas las "incertidumbres" que se presentan ante la desescalada, que va a necesitar de "mucha prudencia, mucho diálogo bilateral con las comunidades y mucha responsabilidad por parte de todos".

Diálogo con los partidos

Además, el jefe del Ejecutivo ha defendido que sí que habla con los partidos para pedirles su apoyo, y prueba de ello es la "decisión política" que su Gobierno ha tomado de que cada prórroga dure quince días para así acudir al Congreso cada dos semanas a "rendir cuentas", informar y debatir.

Pedro Sánchez ha insistido en el riesgo que supondría no prorrogar el estado de alarma, y no sólo para la salud sino también para la economía, y ha puesto de ejemplo que en el próximo Consejo de Ministros se aprobarán otros 20.000 millones de liquidez para pymes y autónomos que quedarían suspendidos si dicha alarma no se prolonga.