Las fuerzas armadas han replegado temporalmente a las tropas de las misiones de adiestramiento en Afganistán, Irak y Mali por la paralización de la mayor parte de sus actividades por la pandemia de COVID-19.

En concreto, han sido replegados 30 militares de la misión "Resolute Support" de Afganistán y entre 150 y 200 de las misiones de "Nato Mission Irak" e "Inherent Resolve" de Irak; además, está previsto el repliegue de más 100 efectivos de la Misión de Adiestramiento de la Unión Europea en Mali (EUTM Mali).

Según ha explicado el Ministerio de Defensa, estas modificaciones se han realizado en coordinación con los aliados de España y con las naciones anfitrionas, por lo que el repliegue temporal de las tropas no afecta a los compromisos con las diferentes organizaciones internacionales de seguridad.

En el resto de operaciones, las fuerzas armadas mantienen los efectivos desplegados y, además, el Ejército del Aire desplegará su contingente en la misión de Policía Aérea del Báltico que comenzará el 1 de mayo en Lituania.

Defensa ha destacado que la seguridad de los soldados es una prioridad, por lo que se está adoptando un procedimiento para prevenir la transmisión del coronavirus en los relevos de todas las misiones.

A los militares que regresen a España y presenten síntomas compatibles con COVID-19 se les realizará una prueba de diagnóstico para el virus. Además, pasarán una cuarentena de 14 días tras su regreso a territorio nacional, de acuerdo con las directrices del Ministerio de Sanidad.

"Gracias a estas medidas para frenar la transmisión del COVID-19, las fuerzas armadas mantienen su total operatividad tanto en territorio nacional como en el exterior", ha resaltado Defensa.