Aunque la salida de la crisis del coronavirus se perciba aún lejos y pese a que el estado de alarma se prorrogará, casi con total seguridad, al menos hasta el 26 de abril, Pedro Sánchez ha puesto el foco ya en la medidas necesarias para la recuperación económica posterior. Y, para el presidente del Gobierno, son claves dos objetivos: en España, unos "pactos de la Moncloa" que incluyan el mayor consenso posible con la oposición, y en Europa, una respuesta de solidaridad de los socios que comporte la emisión de deuda común: los eurobonos.

Este sábado, en su comparecencia para anunciar la extensión del estado de alarma, Sánchez, aseguró que España "nunca va a renunciar a los eurobonos" porque, explicó, "eso es la solidaridad y eso es Europa".

"Si la Unión Europea existe es para hacer frente a este tipo de crisis", advirtió.

Sánchez se pronunció en estos términos durante una comparecencia desde el Palacio de la Moncloa para informar de que el Gobierno va a pedir al Congreso la próxima semana una prórroga del estado de alarma hasta el día 26 de abril.

A preguntas remitidas previamente a la comparecencia por los periodistas, el jefe del Ejecutivo consideró que el hecho de que "estamos en un punto de inflexión es evidente", aunque ahora lo que está por ver es cuál será la dirección que se emprenderá.

"Va a depender mucho de la respuesta que demos", indicó el presidente.

E incidió "Si la UE existe es para hacer frente a este tipo de crisis. Lo hicimos después de la II Guerra Mundial y lo estamos haciendo ahora: es la mayor crisis de nuestras vidas y nos estamos jugando la fortaleza o el debilitamiento de la UE".

Sánchez ha reafirmado que la determinación del Gobierno es "total y absoluta": no renunciar nunca a los eurobonos.

"Europa no puede fallar esta vez, es la hora de que Europa proteja a los europeos frente a esta calamidad y esta desgracia... Se ha resistido durante demasiado tiempo a dar pasos para avanzar", afirmó el presidente durante su intervención inicial.

En ese sentido, se mostró convencido de que también aquellos gobiernos más reticentes "al final serán conscientes de que para salvaguardar y fortalecer este proyecto común que se llama Europa" tendrán que sacar lecciones de la pandemia y avanzar en el proyecto europeo.

"Pactos de la Moncloa"

Además, el Gobierno ya prepara un plan para recuperar gradualmente la actividad económica y social del país "tras el bestial impacto ocasionado por la crisis" una vez se logre contener la epidemia, según anunció Sánchez.

"Desde hace unas semanas, un equipo de técnicos de muy distintas disciplinas trabajan en un plan para abordar la recuperación de la actividad económica y social al tiempo que se mantiene la contención del virus", indicó.

"El Gobierno ya trabaja en el medio plazo, en qué hacer en las próximas semanas una vez que se contenga el virus", aseveró respecto a lo que, según indicó, será una fase de "transición hacia la normalidad".

En el plan se establecerán medidas sanitarias y relacionadas con el higiene, pero también iniciativas vinculadas con el uso de las nuevas tecnologías para garantizar el control del virus y "medidas para la reconstrucción de la economía tras el bestial impacto" registrado por el coronavirus.

En este sentido, para la puesta en marcha de esta "reconstrucción", el presidente del Ejecutivo apeló a la unidad y al diálogo con todos para reeditar unos nuevos Pactos de la Moncloa "para recuperar la economía y el tejido social".

"Vamos a hablar con todos, con todos los partidos políticos y todos los sectores y los agentes económicos para que el país no quede bloqueado y siga adelante", aseveró Sánchez.

"Nadie quedará atrás"

Asimismo, Sánchez garantizó que en la próxima "fase de transición" a la normalidad en España, una vez se doblegue el virus, el Gobierno mantendrá una "enorme empatía social", además de "precaución". "No nos podemos permitir el lujo de dar un paso atrás en el ámbito de la lucha contra la pandemia".

Respecto a la protección social, aseguró que el Estado "reactivará todos sus recursos para amparar a las familias más vulnerables". "Para que a las víctimas civiles no se sumen víctimas sociales", subrayó. "En esta crisis nadie va a quedar a atrás", reiteró.

No obstante, advirtió que "para garantizar y sostener las rentas, la economía española se va a tener que endeudar" y que esto "supondrá detraer recursos a las generaciones futuras".

El presidente también se refirió al tejido empresarial, para expresar el "reconocimiento" del Gobierno a todos los "empresarios que están aguantando el tirón para mantener su negocio y sus empleos". "Ese esfuerzo lo sentimos como propio", afirmó.