El comisario de los Mossos d'Esquadra Ferran López, quien fuera número dos del mayor José Luis Trapero, ha asegurado este jueves que la policía autonómica, y sus mandos en concreto, actuaron de forma "leal" hacia el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, coordinador del dispositivo policial para el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, "hasta el final".

En el juicio contra la cúpula de los Mossos durante el 'procés', que se está celebrando en la Audiencia Nacional desde la semana pasada, López ha respondido a las preguntas de la abogada del mayor, a quien ha querido dejar claro que a partir del 25 de septiembre la figura de Pérez de los Cobos como coordinador no fue cuestionada por la policía catalana y que ésta actuó con lealtad hasta que se dio por finalizado el dispositivo policial.

Según ha afirmado, cuando Trapero le encargó mantener la comunicación con Pérez de los Cobos debido a las diferencias que habían surgido entre ambos, el comisario le fue dando información puntual del dispositivo de los Mossos, tanto en los días previos al referéndum cuando los agentes debían acudir a los colegios a informar de la orden judicial para cerrarlos como la misma mañana de la votación.

No mostraron "simpatía" por el 'procés'

López ha manifestado que ni él "ni ningún otro miembro de la prefectura (jefatura)" de Mossos "mostró simpatía" por las actuaciones del Govern de Carles Puigdemont en el proceso independentista.

El comisario ha ahondado en la declaración que prestó ayer a preguntas del fiscal Pedro Rubira y ha asegurado que el mayor Trapero no era el único responsable de Mossos de las órdenes operativas que se transmitieron durante esos días de otoño a los efectivos, pues las decisiones se tomaban de común acuerdo con todos los jefes policiales.

"Los planes y las pautas de actuación eran comunes de todos los miembros de prefectura, se ponían las propuestas en comun", ha manifestado, descargando así de Trapero, principal acusado en este juicio y para quien se piden 11 años de prisión, parte de la responsabilidad de cómo actuaron los mossos esos días.

Mirada jurídica

Además, ha subrayado que cuando cuatro jefes de los Mossos fueron apercibidos por el Tribunal Constitucional a principios de septiembre, se tomaron "muy en serio" cualquier aspecto formal de las órdenes que se dictaban y que por eso instaron a la jefa del gabinete jurídico de la policía a que se sumase a las reuniones para que incorporara su "mirada jurídica".

López ha insistido también en que la mayoría de agentes de que disponía la policía autonómica eran de labores de seguridad ciudadana y no de orden público, por lo que no tenían la formación adecuada para disolver concentraciones. "No se les puede decir que hagan cosas que no saben hacer; es como pedirles que actúen en el mar".

La abogada de Trapero también ha preguntado al comisario por determinados comportamientos permisivos de agentes durante el 1-O. "El mayor decía que cada uno tendría que afrontar su responsabilidad; lo comentaba de manera habitual tanto el día 1 de octubre como el día 2. Si alguien se situaba fuera de las pautas, había que hacer responsable a esa persona concreta", ha indicado, para lamentar después que se produjeron más casos de este tipo de los que los jefes policiales pensaban que podría haber en un principio.

En cuanto a la protesta ante la Consejería de Economía de la Generalitat el 20 y 21 de septiembre, el comisario ha vuelto a explicar que las comunicaciones por escrito "no reflejan" el apoyo que se estaba prestando a la Guardia Civil, pues éste fue mayor vía telefónica y que la razón por la que no se pudo hacer un cordón policial para permitir la entrada de detenidos fue puramente técnica.

"Fue una conjunción de cosas: el número de personas, la situación geográfica del edificio y lo compactadas que estaban las fuerzas de orden público". "Ojalá hubiésemos podido dar cumplimiento a los requerimientos de la Guardia Civil y ojalá la comisión hubiese podido salir de la manera digna en la que debería haber salido", ha lamentado en otro momento.

Discusión con Jordi Sànchez

López también ha confirmado la versión de Trapero de que ese día habló varias veces con el entonces presidente de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sànchez, y que la última vez fue por la tarde, cuando el mayor "le colgó el teléfono de malas maneras" después de "recordarle que no era nadie para hacer un dispositivo policial".

Sobre la reunión que los mandos de los Mossos mantuvieron con el expresidente Carles Puigdemont, el exvicepresidente Oriol Junqueras y el exconsejero de Interior Joaquim Forn el día 28 de septiembre en la que les advirtieron de posibles desórdenes públicos el 1-O, López ha comentado que informó de ello al coordinador Pérez de los Cobos y le transmitió que el Govern no tenía intención de desconvocar el referéndum.

El comisario López también ha sido interrogado por Cristóbal Martell, abogado del ex director general de los Mossos Pere Soler, acusado para quien también se piden 11 años de cárcel. Según el que fuera número dos de Trapero, los jefes políticos de la policía no hicieron "ninguna interferencia" en lo que respecta a decisiones operativas ni el mayor transmitió "ninguna sugerencia" de Soler.