Industrias Químicas del Óxido de Etileno (IQOXE), la empresa en cuya factoría de Tarragona se registraron el martes dos violentas explosiones y un incendio causando tres muertos y siete heridos, no avisó al centro de emergencias de la Generalitat. Este hecho llevó ayer a los vecinos de la petroquímica a movilizarse para exigir más seguridad. "No se puede mirar hacia otro lado", clamaron centenares de manifestantes en la plaza de la Font de Tarragona

Un día después de la virulenta explosión, originada en uno de los tanques reactores de la compañía, los bomberos localizaron sepultado entre los escombros el cadáver del operario que estaba desparecido. El otro fallecido es un vecino que murió al desprenderse el techo de su piso sobre el que impactó la tapa del reactor, una chapa de hierro de una tonelada, que voló unos tres kilómetros propulsada por la explosión.

La tercera víctima mortal es otro de los trabajadores de la empresa que estaba ingresado en estado crítico en el hospital Vall d'Hebron de Barcelona, con quemaduras en el ochenta por ciento del cuerpo, que acabó falleciendo ayer.

La empresa petroquímica lamentó el fallecimiento de tres personas y reiteró su agradecimiento a los Bomberos por su labor en la extinción del incendio. En un comunicado, la compañía afirma que se ha puesto en contacto con las familias de las víctimas para darles su más sentido pésame y ofrecerles "todo aquello que necesiten". También ha abierto una investigación interna para conocer la causa del incidente y colaborando con los Bomberos para trasvasar el producto restante del depósito afectado.