El magistrado instructor de la causa del "procés", Pablo Llarena, acordó ayer mantener la vigencia de las euroórdenes de detención y entrega dictadas contra el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y su exconsejero Antoni Comín, ambos huidos en Bélgica, si bien tramita el suplicatorio al Parlamento Europeo para que suspenda sus inmunidades y poder de esta manera seguir procediendo penalmente contra ambos líderes catalanes.

La aplicación práctica de la medida es que ni Puigdemont ni Comín pueden ser detenidos en ningún Estado miembro de la Unión Europea, salvo en España, al tener la condición de europarlamentario con inmunidad de desplazamiento, según se explica en las resoluciones dadas a conocer ayer por Tribunal Supremo.

Ello impedirá que puedan ser detenidos cuando viajen a Estrasburgo (Francia) el próximo lunes, día 13 de este mes, para participar en el pleno de la Eurocámara, al que han sido convocados.

Territorio español

En las resoluciones que dictó ayer, el magistrado del Tribunal Supremo ratifica la orden de detención en territorio español, donde si los líderes independentistas fueran arrestados no les alcanzaría la inmunidad al estar ya procesados, y no se requeriría suplicatorio.

Asimismo, pide a Bélgica que deje sin efecto los plazos para resolver sobre las euroórdenes hasta que el Parlamento Europeo decida sobre los suplicatorios.

La resolución de Llarena argumenta, para justificar que se alce la inmunidad que reconoce a Puigdemont y Comín su condición de europarlamentarios, que los hechos imputados a ambos líderes independentistas son muy anteriores a su elección europea y no guardan relación alguna con su actividad en la Eurocámara.

Por último, inadmite la recusación de los secesionistas contra él por juzgarla extemporánea.