Seis meses le ha durado al PSdeG-PSOE ser el partido más votado en Galicia en unas elecciones superando al PP en papeletas. Ha perdido la hegemonía y vuelve a ser la segunda fuerza, pero el hecho de mantener los 10 escaños en el Congreso de los Diputados y quedar solo 10.000 votos por debajo de los populares es un resultado muy reconfortante para los socialistas, ya que les permite seguir soñando con desbancar al PP de la Xunta en los próximos comicios autonómicos. No ya solo por el "empate" técnico, según lo entiende el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, que posibilita al PSOE gallego mirar de tú a tú al PP, sino porque en las tres citas con las urnas celebradas este año, dos generales y una municipal, ha triunfado el voto progresista. "Hubo un cambio estructural en el país, un cambio hacia una mayoría progresista y de izquierdas. Hay una nueva Galicia que emerge con fuerza y que se ha plasmado en todas las convocatorias electorales de este 2019", declaró Gonzalo Caballero en su valoración de los resultados.

Pese a registrar algo más de 60.000 votos menos que en los comicios de abril, los socialistas se lo tomaron como una victoria. Están convencidos de que los resultados de ayer los refuerzan para retar con opciones a Feijóo -o a quien lidere el PP por entonces- en la próxima contienda electoral autonómica. De hecho, Caballero volvió a referirse como "histórico" al resultado obtenido. "Estamos preparados para que cuando en Galicia haya elecciones autonómicas se ponga fin de ciclo a la etapa de Feijóo en la Xunta", manifestó el dirigente socialista.

El PSOE calculaba internamente que podrían quedar unos 30.000 votos por debajo del PP. Veían como una quimera volver a repetir como primera fuerza. Así que el estar solo a 10.000 papeletas, prácticamente con el mismo porcentaje de apoyo y conservar los diez escaños justificaban las caras de satisfacción de Caballero y de su equipo ayer en la sede del partido en Santiago. Es un tanque extra de combustible para las autonómicas.

"Empate con el PP en número de votos, en diputados y en porcentaje de votos, con una diferencia de 0,78 puntos", destacó Caballero, quien consideró que Feijóo volvió a recibir el domingo "un jarro de agua fría" toda vez que "las derechas en Galicia tienen el mismo nivel de apoyo que en abril", un 44%, frente a una "mayoría amplia de voto progresista liderada por el PSdeG que supera el 50% de los apoyos.

Se jactó el dirigente socialista de que el Partido Popular no fuera capaz de aglutinar a la mayoría de los gallegos, y eso que pudo beneficiarse de la desaparición de Ciudadanos en Galicia. "Si hoy hubiera elecciones autonómicas, Feijóo no tendría posibilidades de liderar el futuro de este país. El PP ha vuelto a pinchar", dijo.

El apoyo del PP ha pasado del 27,42% de abril al 31,96%. Una subida notable. Y el PSOE, a pesar de la pérdida de votos, ha mantenido su respaldo en unos niveles muy parecidos a los de hace seis meses. Del 32,09% al 31,29%.

Todo lo puso en valor Gonzalo Caballero en su análisis, tanto como el hecho de que de los 23 escaños de diputados que corresponden a Galicia, 10 sean del PP y los otros 13 pertenezcan a partidos de izquierdas. "Los gallegos decimos con esto que queremos un gobierno progresista en Madrid.

El PP ganó un diputado con respecto a abril, pero Ciudadanos laminó sus dos actas, una de las cuales ha acabado en manos del Bloque, que regresa a la Cámara Baja.

"El problema de Feijóo es que ya no tiene con quien buscar acuerdos. Succionó parte de los votos de Ciudadanos pero queda de nuevo aislado frente a una nueva mayoría social de izquierdas y progresista", clamó el secretario xeral del PSdeG contra el presidente de la Xunta.

En cuanto al escenario estatal, el líder de los socialistas gallegos lamentó el crecimiento de Vox -partido al que no se refirió por su nombre durante su intervención de valoración de los resultados- a costa del desmoronamiento de Ciudadanos y advirtió de que el auge de este partido de ultraderecha supone un "riesgo para el sistema político" de España. Por ello, entiende que la subida de Vox debe llevar a a una llamada de atención al PP por blanquear a esta formación extremista con sus pactos y por el riesgo para lo propios populares de que sean devorados.

Asimismo, Caballero también quiso "poner en valor el buen funcionamiento de la jornada democrática", sin apenas incidencias, y felicitó a los miembros de su partido por el trabajo llevado a cabo durante la campaña y en la propia cita electoral. "Queremos señalar que el Partido Socialista de Galicia tenía en el mes de enero seis diputados, en abril nos pusimos en diez y ahora tenemos otra vez los mismos", destacó el representante del PSdeG.

Gonzalo Caballero siguió el escrutinio en la sede nacional del PSdeG-PSOE en Santiago, acompañado por los miembros da su ejecutiva, entre los que se encuentran el portavoz parlamentario del partido, Xoaquín Fernández Leiceaga.