Apoyo de Unidas Podemos (UP) desde fuera del Gobierno sobre la base de un programa compartido o repetición de elecciones. Para el PSOE esa es la única disyuntiva que cabe resolver en las menos de cuatro semanas que restan para que el 23 de septiembre se disuelvan las Cortes si no hay un presidente electo. Los socialistas presionan hacia esa vía de un ejecutivo "a la portuguesa" con la amenaza de que Pedro Sánchez ni siquiera intente la investidura en el caso de no tener garantizado de antemano su éxito. Tras el fracaso de julio, el líder socialista carece del encargo del Rey de formar Gobierno y no es candidato a presidirlo, advertía ayer la vicepresidenta Carmen Calvo, en un nuevo giro de tuerca para intensificar el empuje hacia el resto de los partidos. "Todos los grupos parlamentarios están obligados, comprometidos y son responsables de la gobernabilidad", afirmaba la vicepresidenta momentos antes del inicio de un nuevo encuentro del presidente en funciones con colectivos sociales. Sánchez se reunirá con el resto de las formaciones "si ha lugar" y para presentarles un programa "fortalecido, ampliado y mejorado". Insistía así Calvo en la posibilidad de que el candidato socialista opte por eludir un intento de investidura si carece de la seguridad anticipada de que esta vez saldrá del Congreso convertido en presidente del Gobierno.

En el reparto de responsabilidades con que argumenta el PSOE y en ausencia de un candidato "a todos compete trabajar", señala Calvo, para quien ya no cabe hablar de gobierno de coalición. La que el PSOE realizó a Unidas Podemos en julio fue una propuesta "en serio, fundamentada", que la formación de Pablo Iglesias "despreció", "literalmente rechazó" e incluso tachó de "estupidez", lamentaba ayer la vicepresidenta, que estuvo al frente del equipo negociador socialista.

Salvo que Unidas Podemos ceda y acepte permitir que el PSOE gobierne en solitario con apoyos externos solo cabe volver a las urnas. Ese fue el mensaje que Pedro Sánchez transmitió a los colectivos con los que se reunió en los últimos días, según fuentes citadas por Europa Press. El líder socialista expuso que las pretensiones de la formación que lidera Iglesias serían un foco de inestabilidad que precipitaría nuevas elecciones a las vuelta de año y medio.

En UP comienzan a surgir voces que sugieren buscar alternativas a la coalición para evitar una repetición electoral el 10 de noviembre. "En este momento nos toca pensar en un Gobierno de coalición, pero si llega el momento de tomar una decisión y hay que pensar en más opciones habrá que ampliar nuestro marco de acuerdo", apuntaba ayer Lander Martínez, secretario general de Podemos Euskadi.