El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, se reunió ayer con los líderes de UGT, José Álvarez, y CC OO, Unai Sordo, quienes le reclamaron que vuelva a la mesa de negociación con Podemos para alcanzar un acuerdo programático que permita evitar una repetición de las elecciones. La reunión con los líderes sindicales se enmarca en la ronda de contactos iniciada la pasada semana por Sánchez para preparar un segundo intento de investidura.

"No contemplamos un escenario de convocatoria electoral", subrayó Sordo en una comparecencia conjunta en la que Álvarez aseguró que "es fundamental que PSOE y Unidas Podemos sean capaces de elaborar un programa de Gobierno", para lo que, dijo, deben reanudarse las negociaciones cuanto antes, porque "en el último minuto todo es más difícil".

"Si tienen desconfianza tendrán que negociar con desconfianza", apuntó el líder de CC OO, "porque la desconfianza no es óbice para abordar la negociación". Sordo aludía así a las declaraciones en las que Sánchez, tras reunirse el miércoles con el Rey, aseguró que su desconfianza hacia el líder de Podemos, Pablo Iglesias, se mantiene "y es recíproca". En esas declaraciones, Sánchez coincidió en que deben evitarse otros comicios, tal y como aconsejó el Rey el domingo.

Los sindicatos resaltaron que el acuerdo programático sería de gran valor para ellos y debería incluir una serie de elementos clave como un mejor reparto de la riqueza, la recuperación de derechos laborales perdidos, la lucha contra la precariedad o la protección a los parados en un país con tres millones de desempleados. La reforma laboral, la del sistema de pensiones y la fiscal figuran entre las reivindicaciones de UGT y CC OO.

Tras reunirse con las centrales, el líder socialista se vio con los presidentes de las patronales CEOE, Antonio Garamendi, y Cepyme, Gerardo Cuerva. Garamendi pidió a Sánchez un Gobierno moderado y estable, y ofreció la lealtad de la patronal "a la opción que salga". "Nosotros no estamos en campaña electoral", dijo el presidente de la CEOE, quien se negó a descalificar a "unas u otras opciones". Cuerva coincidió con los planteamientos de Garamendi y expuso al líder del Ejecutivo la petición de que el futuro Gobierno tenga a la empresa en el centro de sus políticas.

Sánchez cerró su ronda de contactos de ayer reuniéndose con las principales asociaciones de autónomos (ATA, UATAE y UPTA), que insistieron en que la formación de Gobierno es "inaplazable" porque la normativa para la protección de los autónomos requiere "un desarrollo urgente". Para los autónomos, "se ha de poner fin ya al bloqueo y la parálisis política".