El PSN, los nacionalistas de Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra (I-E), la IU navarra, cerraron ayer un programa de gobierno "ambicioso, centrado en las personas", que compromete a los cuatro partidos a votar a favor de la investidura de la socialista María Chivite, que no será presidenta de la comunidad a menos que EH Bildu se abstenga.

La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, insistió en que el PSN no ha pactado con Bildu para ganarse su abstención, pero admitió que la política no consiste sino en dialogar. "Si la moda es no hablar con nadie, ya me dirán qué podemos resolver. Vamos a ver, con toda claridad, el PSN no pactó con Bildu", sentenció Celaá.

El objetivo es formar un Gobierno que gestione Navarra los próximos cuatro años y que "profundice en nuestro autogobierno desde la lealtad institucional", resumió Chivite al dar cuenta de las grandes líneas del programa pactado, que deberá ser ratificado en el seno de cada formación.

Chivite agradeció "la disposición y voluntad de diálogo" del resto de las fuerzas, que se materializa en un preacuerdo "de clara marca progresista, con grandes avances sociales, que afronta los retos económicos de nuestra comunidad y hace especial hincapié en la convivencia".

Sobre la ausencia de EH Bildu en el acuerdo, Chivite reiteró que en el PSN "no vamos a negociar nada" con la formación abertzale, aunque con el programa ya acordado a cuatro" Bildu "verá qué quiere hacer en base a ese programa".

Pero reconoció que si su investidura fracasa porque Bildu no se abstiene, los cuatro firmantes del pacto carecen de "un plan B". Solo "estamos trabajando en nuestro plan", añadió.

Por parte de Geroa Bai, Uxue Barkos coincidió en valorar el "ambicioso, progresista y plural" acuerdo que acogen con "satisfacción" porque "marca las líneas que ya vienen trabajándose" esta legislatura, y que vuelve a poner en valor "la capacidad desde la diferencia de trabajar para dar respuesta a la ciudadanía".

Negó que su partido vaya a ejercer de intermediario para ganar la abstención de los abertzales: "Geroa Bai no es intermediario de nadie".

El líder de Cs, Albert Rivera, consideró una "traición a los constitucionalistas" el pacto, con el que el presidente en funciones, Pedro Sánchez, "ha cruzado una línea roja". "España no se merece un presidente capaz de algo así", le afeó Rivera. Cs, junto con PP y UPN, formó la coalición Navarra Suma, ganadora de los comicios.