Los peritos informáticos de la Policía y del PP han discrepado este jueves sobre el procedimiento para borrar definitivamente los archivos de un disco duro: 35 sobreescrituras, como hizo el partido sobre los ordenadores de su extesorero Luis Bárcenas o "una única pasada", lo que bastaría según la policía.

Los peritos han protagonizado la cuarta y penúltima sesión del juicio oral sobre el borrado de los discos duros en los que Bárcenas sostiene que guardaba información sobre la caja B del PP y que el partido sostiene que destruyó en aplicación de la Ley de Protección de Datos cuando el extesorero dejó su sede de Génova.

Los peritos de la Policía Nacional que analizaron el disco duro de uno de los dos portátiles entregados por el PP en la Audiencia Nacional en 2013 -el otro ordenador estaba vacío- han ratificado que no pudieron recuperar "absolutamente ningún rastro de ningún archivo anterior" al 3 de julio de ese año, cuando se instaló en el disco un nuevo sistema operativo.

Seis días antes Bárcenas había ingresado en prisión en el marco de la investigación del caso Gürtel, tras descubrirse sus millonarias cuentas en Suiza.

El PP ha asegurado en el juicio que aplicó un procedimiento de borrado seguro habitual cuando una persona deja el partido y se van a reasignar sus equipos, el método Gutmann, que implica sobreescribir 35 veces en todo el disco.

Según ha declarado uno de los peritos policiales, se trata de un estándar que se fija en Estados Unidos para garantizar la seguridad, pero "con una única pasada de sobreescritura general sobre todo el disco" ya habría sido imposible recuperar ningún archivo.

Las 35 pasadas anulan la posibilidad teórica de recuperar información previa forzando el cabezal de lectura del disco, pero el perito ha señalado que no conoce ningún caso en el que se haya aplicado ese sistema de recuperación de archivos y que la Policía no dispone de la herramienta para hacerlo.

Los peritos de Grant Thornton que han realizado un informe para el PP han subrayado que los borrados aplicados en el partido buscan cumplir el reglamento de protección de datos y se corresponden con "las mejores prácticas tanto a nivel nacional como internacional en esta materia".

El PP siguió las normas del Instituto Nacional de Ciberseguridad, que entre los programas que recomienda para un borrado seguro incluye el Gutmann, han subrayado.

Preguntados por la letrada de la acusación popular Isabel Elbal si tuvieron en cuenta en su análisis que cuando se hizo el borrado había abiertas dos investigaciones judiciales sobre posibles irregularidades contables en el partido, los expertos han reconocido que eran casos "de dominio público", pero que su peritaje es exclusivamente técnico.

Los informáticos citados este jueves se han extendido también en el análisis de los archivos guardados en la memoria USB que Bárcenas entregó en la Audiencia Nacional en 2013 con datos de la presunta contabilidad B del PP.

Los agentes de la Policía han planteado diversas explicaciones que podrían justificar que los archivos tuvieran diferentes fechas de creación o modificación, mientras que los peritos de Grant Thornton han señalado que no podían pronunciarse sobre su integridad porque cuando ellos hicieron su copia forense la memoria había sufrido "una alteración en su contenido".

Según han explicado, después de que Bárcenas entregara el USB al juzgado hubo archivos que fueron abiertos, aunque han admitido que pudo hacerlo el propio juez.

El juicio, en el que están acusados el PP por delito de daños informáticos y tres de sus empleados también por encubrimiento, termina mañana viernes en el juzgado de lo penal número 31 de Madrid con la presentación de las conclusiones finales.