El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, anunció ayer que Ana Pastor será vicepresidenta en la Mesa del Congreso de los Diputados "por su rigor, solvencia y capacidad de diálogo para afrontar una legislatura muy complicada". Pastor pondrá hoy fin a su mandato de casi tres años como presidenta del Congreso de los Diputados con la rendición de cuentas de la legislatura ante la última reunión de la Diputación Permanente.
Casado subrayó en un acto de campaña en Ribeira que la Mesa del Congreso estará presidida por Meritxell Batet, "quien ha apoyado los indultos", y por Gerardo Pisarello, "el que quita la bandera de España en el Ayuntamiento de Barcelona". Por ello, augura una "legislatura complicada" ya que "el nacionalismo está envalentonado" gracias al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.
Así, lamentó que hoy los "presos golpistas" vayan a "instrumentalizar el Parlamento" cuando vayan a acreditarse en el Congreso. En este sentido, anunció que pedirá que se exija "que juren o prometan por la Constitución y por el Rey y que no hagan fórmulas para humillar la legalidad y las instituciones españolas".
