Vox ha entrado con fuerza en la política nacional. Sobre todo en Castilla-La Mancha, donde alcanzó un 15,29 por ciento de los votos. Incluso en Cuenca arrebató el tercer lugar a Ciudadanos, un hecho que también se registró en Almería, donde con un 19,1 por ciento de los votos obtuvo su mejor porcentaje provincial. Estuvo a punto de superar también a Ciudadanos en Murcia, donde alcanzó el 18,6 por ciento de los sufragios, así como en Toledo y Guadalajara. Vox obtuvo resultados testimoniales en el País Vasco (sumó el 2,21 por ciento de los votos), Cataluña (3,60) y Navarra (4,8). Obtuvo malos resultados en Canarias y Galicia. El caso gallego, donde solo logró el 5,27 por ciento de los votos, es digno de análisis, porque Vox apenas ha arañado votos al PP, pese a que esta formación (o quizá precisamente por eso), con Alberto Núñez Feijóo a la cabeza, mantiene allí un discurso mucho más centrista y moderado que en el resto del Estado. Vox es segunda fuerza en Ceuta, por detrás del PSOE, con el 23,91 por ciento de los votos.