Con Vox como destinatario del mensaje, aunque sin citarlo, el líder del PP, Pablo Casado, pidió ayer a los "partidos nuevos" que hagan una "reflexión" sobre si conviene que concurran o no en las circunscripciones pequeñas en las elecciones generales de abril. Casado advierte de que la fragmentación del voto favorezca al PSOE.

Hay provincias "de menos de seis diputados", que suponen "casi la tercera parte del Congreso", en las que los últimos escaños de esas circunscripciones, "unos veinte", según Casado, "basculan entre el PP, el PSOE o Podemos". Casado puso de ejemplo al Partido Aragonés, su socio electoral en anteriores convocatorias, por su decisión "responsable" de no presentarse a las generales. "Ojalá otros partidos también hicieran este análisis de responsabilidad y reflexionen si, en algunas circunscripciones, merece la pena dividir el voto para que algunos escaños pasen al PSOE y a Podemos", señaló.

Insistió en que "la reflexión que hay que hacer es si merece la pena" que "partidos nuevos", en alusión a Vox, vayan a permitir una fragmentación del voto constitucionalista en esas provincias, de forma que esos escaños vayan a "engrosar las filas de la izquierda radical, en manos de Torra, los independentistas y los batasunos".

No plegarse al PP

Como respuesta, Vox asegura que "mantiene sus candidaturas en todas las circunscripciones electorales" porque así se comprometió. En un comunicado, el partido de Abascal señala que el secretario general de la formación, Javier Ortega, ya contestó a su homólogo del PP, Teodoro García Egea, que la decisión adoptada por el Comité Ejecutivo Nacional del partido de concurrir en todas las circunscripciones era "inamovible" y que Vox "no se va a plegar a los intereses de ningún otro partido político".

En este sentido, recuerda que Vox se comprometió a "representar a los españoles en las elecciones generales presentando candidaturas en todas las circunscripciones electorales y mantiene su compromiso frente a las peticiones de otras formaciones políticas".