Ochenta años después de que, en enero y febrero de 1939, medio millón de personas cruzara la frontera francesa huyendo del avance de las tropas franquistas sobre los últimos retazos de la España republicana, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió ayer "perdón" al exilio en nombre de todo el país. Lo hizo con un discurso en las playas de Argelès-sur-Mer, donde el Gobierno francés abrió un campo de concentración en el que, en condiciones deplorables, fueron confinadas unas cien mil personas. Previamente depositó sendas coronas de flores sobre las tumbas del segundo presidente de la II República, Manuel Azaña. y del poeta Antonio Machado, en las localidades de Montauban y Collioure, respectivamente.

Sánchez admitió que la petición de perdón y el tributo rendido a la España exiliada llegan "tarde, muy tarde", incluso "a deshora", pero añadió que se acometen "con el orgullo de recuperarlos para siempre" y de "rendir homenaje a aquella democracia española que fue derrotada por la tiranía".

El líder socialista aprovechó para lanzar una llamada de atención sobre los tiempos presentes y advertir que "no cabe la indiferencia" ni "mirar a otra parte" pensando que "el antisemitismo, la homofobia, la xenofobia o el nacionalismo excluyente son pequeños vientos sin importancia que se apagarán solos". Todos los actos de homenaje fueron seguidos de cerca por independentistas catalanes que trataron de boicotearlos con silbidos y abucheos. Paradójicamente, algunos de los secesionistas enarbolaban banderas de ERC, partido en el que militaban parte de los exiliados a los que se homenajeaba ayer.

Un homenaje que Sánchez quiso personificar en las figuras de Machado y Azaña, ante cuyas tumbas expresó "el respeto de su patria que un día les fue negado". Tras recordarlos como "dos personas dialogantes, cultas, creativas, pacíficas y sensatas", el presidente resaltó que el hecho de que numerosos españoles, al margen de su ideología, lean a Azaña y Machado es prueba de que la Constitución de 1978 "restauró los valores" de la República de 1931.