El PP reclamó el pasado domingo en Madrid, en su concentración con Cs y Vox, un adelanto inmediato de las elecciones. Sin embargo, sus preferencias se orientan más hacia una quíntuple cita el 26 de mayo (Congreso, Senado, municipales, autonómicas y europeas) que hacia elecciones en abril.

Así lo declaró su portavoz en el Congreso, Dolors Montserrat, quien, al igual que hiciera la víspera su jefe de filas, Pablo Casado, rechazó unos comicios en abril por la proximidad de las dos citas electorales. Montserrat resaltó que juntar todas las elecciones el 26 de mayo permitiría "ahorrar" los 200 millones de euros que, calculó, costaría esa cita en solitario. El cálculo de Montserrat no tiene en cuenta los gastos específicos de las generales, que habrán de hacerse con independencia del día de celebración de esos comicios.

En clave electoral, Casado lanzó ayer sus dardos más afilados al presidente de Cs, Albert Rivera, a quien exigió, sin citarlo, que explique antes de que se acuda a votar si habría algún partido dispuesto a reeditar "el pacto del abrazo", denominación con la que se conoce el acuerdo alcanzado en 2016 entre el PSOE y Ciudadanos para la investidura, luego fallida, del socialista Pedro Sánchez.

El secretario general de Cs, José Manuel Villegas, aseguró que su partido "cierra la puerta" a cualquier posibilidad de acuerdo con "este PSOE" y, en todo caso, tendrían que ser los socialistas los que decidan si se libran del "sanchismo" y vuelven a mirar hacia el centro ideológico.

La sesión de control de la próxima semana en el Congreso permitirá comprobar que la oposición, incluido el grupo de Unidos Podemos, da por terminado el mandato de Pedro Sánchez al frente del Gobierno, y por ello, le preguntarán por el balance que hace de sus ocho meses en Moncloa.

Así, el líder del PP, Pablo Casado, preguntará a Sánchez por "el balance que hace de sus ochos meses de gobierno", prácticamente la misma cuestión que planteará la portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero.

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, se desvía de las dos preguntas anteriores en la literalidad, pero no en la intención política, ya que en su caso la cuestión es: "¿Qué valoración hace de las nuevas circunstancias que concurren en la situación política de España?".