El Gobierno lanzó ayer la amenaza de un adelanto de las elecciones generales al mes de abril en un último intento de presionar a los soberanistas catalanes para que no tumben sus Presupuestos en el debate parlamentario que hoy comienza. El momento decisivo llegará mañana con la votación de las seis enmiendas de totalidad, que de prosperar harían decaer el proyecto del Ejecutivo. Los soberanistas rechazan las presiones del Ejecutivo con el calendario electoral.

Ante la eventualidad de que las Cuentas no lleguen a someterse a un examen más pormenorizado en el Congreso, con su tramitación a partir de mañana si obtuvieran el respaldo suficiente, el Ejecutivo abrió ayer un posible nuevo escenario electoral. La agencia Efe informó de que el 14 de abril es una de las fechas que el presidente Sánchez baraja para una posible convocatoria de elecciones anticipadas. Otra fecha opcional sería el 28 de abril, según fuentes del Palacio de la Moncloa citadas por Efe. Estas fechas modifican los dos escenarios barajados hasta ahora, el de añadir los comicios generales a la triple convocatoria de mayo, cuando se votará para renovar ayuntamientos, parlamentos regionales y la representación europea, o llamar a las urnas en otoño.

El Ejecutivo mantiene todavía la incógnita, que, de hacerlo, no se despejará antes de la votación de mañana en el Congreso. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, la encargada hoy de defender las Cuentas, advertía de que la legislatura se acortará si el proyecto del Gobierno no sale adelante. En esa misma idea coinciden otros dirigentes socialistas, aunque, en última instancia, todos reconocen que la palabra definitiva la tiene el presidente Sánchez por su potestad para pone fin a la legislatura.

Soberanistas

El Govern y las fuerzas soberanistas catalanas rechazaron ayer lo que consideran "presiones" del Gobierno para facilitar la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado. La consellera de la Presidencia, Elsa Artadi, reprochó a Sánchez que lance "globos sonda" sobre posibles comicios en lugar de comunicarse con la Generalitat, ERC y PDeCAT para retomar unas negociaciones que decidió frenar "en seco" la semana pasada, en vísperas de la concentración convocada por PP, Ciudadanos y Vox para exigir elecciones. "Si el Gobierno de Pedro Sánchez tiene algún interés en que los grupos independentistas en Madrid ayuden a tramitar los presupuestos, en lugar de enviar globos sonda debería ponerse en contacto con los grupos independentistas", señaló la consellera.

El portavoz adjunto de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, afirma que su partido "no se le chantajea" y considera "un buen día" para votar el 14 de abril, aniversario de la proclamación de la II República.

El pleno que hoy comienza sacará al estrado a los líderes de PP, Pablo Casado. y de Ciudadanos, Albert Rivera.