El principal condenado en el caso Malaya, Juan Antonio Roca, acaba de acceder a la libertad condicional después de que haya accedido a la petición de sus abogados el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional contra el criterio de la Junta de Tratamiento del Centro de Inserción Social (CIS) de Málaga, que controlaba su tercer grado, concedido en marzo de 2018, según informaron fuentes judiciales a este periódico.

Roca cumple una acumulación de condenas por diferentes casos, entre los que cabe destacar Saqueo o Malaya, así como por su participación en convenios urbanísticos supuestamente irregulares que perjudicaron a las arcas marbellíes cuando él dirigía el urbanismo de la ciudad, que suman un total de 20 años, el máximo previsto en la ley. Hasta ahora, el cartagenero ha devuelto nueve millones de euros del total de 25 que debía reintegrar por los diferentes procedimientos judiciales en concepto de responsabilidad civil. Curiosamente, señalan las fuentes judiciales consultadas, el juzgado ha tardado más de siete meses en resolver sobre su libertad condicional cuando lo habitual es que tarde unos dos meses, lo que se debería a la resolución desfavorable a esta medida de la Junta de Tratamiento del CIS malagueño.

La libertad condicional le exime de llevar un dispositivo de control telemático impuesto cuando accedió al tercer grado, y la libertad definitiva la recuperará el 17 de junio de 2023, cuando expira la suma de sus condenas.

El magistrado que le otorgó el tercer grado en marzo del año pasado aseguraba en su auto que el interno iba a compatibilizar sus tareas profesionales con las de voluntariado, aunque no iba a dormir al CIS al ser objeto del control telemática. El sentenciado por Malaya se ofreció a colaborar con una ONG.

Para la concesión de este régimen de tercer grado, el magistrado tuvo en cuenta su actitud positiva en aras a devolver la responsabilidad civil por la que fue condenado vendiendo buena parte de sus bienes, así como que su conducta en los diferentes centros carcelarios por los que ha pasado es excelente.

Roca ingresó en la cárcel el 29 de marzo de 2006, el día que estalló el caso Malaya y fue el preso español que pasó más tiempo en prisión preventiva, cuatro años, por delitos de naturaleza económica. Durante todos los permisos de los que ha disfrutado su conducta ha sido buena y ha asumido la responsabilidad en los delitos de los que se acusaba. Aún, por cierto, tiene numerosos procedimientos por los que ha de ser juzgados, aunque se le condenó no sólo por Malaya o Saqueo 1 y 2, también por Minutas.