El Rey Felipe VI ha expresado este miércoles a los militares españoles desplazados a Irak su "orgullo" por la labor que desempeñan, y se ha mostrado convencido de que ese sentimiento lo comparten todos los españoles: "Os ven como soldados de la democracia, de la paz y de la libertad", ha dicho.

Además, ha subrayado que la misión española en Irak, centrada en el adiestramiento de las Fuerzas Armadas iraquíes "es sin duda una contribución a la paz y a la estabilidad de la región pero también al interés nacional". "La seguridad no es materia reservada al límite fronterizo, es algo que hay que saber proyectar y compartir con nuestros aliados y con todos los países dispuestos a colaborar", ha remachado.

El jefe del Estado se ha expresado así, en la última etapa de su viaje relámpago a Irak, ante el contingente de más de 300 militares españoles de la base 'Gran Capitán' de Besmayah. Por la mañana en Bagdad y por la tarde en Besmayah, Felipe VI ha querido pasar su 51 cumpleaños con militares desplegados. Como "mando supremo" y como militar que 'siente' el uniforme, ha elogiado su labor y el impacto que generan.

Tras sus breves palabras en la 'Plaza Ibérica' de la base, el Rey y la ministra de Defensa, Margarita Robles, han posado para una foto de familia con los efectivos españoles, y después, tal como ha sucedido en Bagdad por la mañana, el contingente se ha arrancado a cantar el "cumpleaños feliz". "Parecía ensayado, qué buenas voces", ha bromeado el Rey, que ha hecho notar que nunca le había cantado el cumpleaños tanta gente a la vez".

Felipe VI almuerza con los mandos de la base y después tendrá un encuentro con el contingente, antes de regresar en helicóptero a Bagdad y, desde allí, a Madrid.