La subida impositiva a grandes empresas y rentas más altas recogida en los Presupuestos de 2019 permitirá una recaudación récord de 227.356 millones de euros con la que el Gobierno financiará unas políticas de gasto que suben en todos los capítulos, salvo el relativo a los intereses de la deuda pública. Entre los incrementos previstos figura un aumento del impuesto de patrimonio del 1% para las fortunas de más de diez millones de euros. También se incrementa la tributación del diésel en 3'8 céntimos por litro para equipararlo a la gasolina. El aumento del 9,5 % de los ingresos impositivos permite mantener el techo de gasto de 125.064 millones comunicado a las Cortes en julio, a pesar de que las cuentas están elaboradas con el objetivo de déficit vigente (1,3 % del PIB para el conjunto de las Administraciones), más exigente que el propuesto por el Ejecutivo socialista (1,8 %). La ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, justificado con esa mayor corrección del déficit la revisión a la baja en una décima, al 2,2 %, de la previsión de crecimiento para este año, en tanto que se eleva en dos décimas, al 14 %, la tasa media de paro prevista.