El Tribunal de Cuentas (TC) considera que no existen anomalías en la contabilidad de Ciudadanos y no se detecta ninguna infracción merecedora de sanción. El órgano fiscalizador resuelve así sobre una denuncia interpuesta por el PP, que acusaba a la formación de Rivera de financiarse a través de los fondos que sus grupos municipales ingresan en una cuenta del partido.

El Tribunal de Cuentas resuelve que "no existe infracción alguna sancionable imputable a Ciudadanos". La formación de Rivera considera que con esta resolución queda zanjado el procedimiento que se inició tras la que denominan "la comisión show" promovida por el PP en el Senado, según fuentes de Cs citadas ayer por Efe .

Ciudadanos, que presume de haber obtenido una puntuación de 10 en el informe de Transparencia Internacional, celebra que el Tribunal de Cuentas haya ratificado "la limpieza" de la contabilidad del partido.

En febrero pasado y a instancias del PP, la comisión mixta de relaciones con el Tribunal de Cuentas pidió a este órgano que analizara si Ciudadanos había cumplido con sus obligaciones tributarias después de encontrar supuestas irregularidades contables en su informe de 2014 y 2015.

De forma paralela, la comisión de financiación de partidos del Senado, en la que solo están representados los populares porque el resto de grupos renunció a participar en ella, empezó a centrarse en el partido naranja. Dicha comisión fue una contestación de los populares en la Cámara Alta, donde tienen mayoría absoluta, a la decisión del resto de los partido de abrir una investigación sobre la financiación del PP.

Tanto el secretario general de esta fuerza política, José Manuel Villegas, como el secretario de Finanzas, Carlos Cuadrado, comparecieron en la comisión del Senado, en la que el PP acusó a la formación naranja de irregularidades en la gestión de las subvenciones a sus representantes institucionales.

Los populares

El PP, que incluso amenazó con llevar a los tribunales a Cuadrado, denunció que los grupos municipales ingresan parte de los fondos públicos que perciben para su actividad en una cuenta del partido y que luego es la dirección la que decide cómo utilizarlos. Ciudadanos defendió en todas sus comparecencias que ese dinero en ningún caso se destinó a sufragar gastos de partido y argumenta que se trata de un sistema de supervisión para controlar en qué se gasta y cómo se gestiona el dinero que ingresan sus representantes institucionales.