El Ministerio de Educación ha introducido una disposición derogatoria única en su anteproyecto de nueva ley educativa en la que se fija que "queda derogada" la Lomce.

Así se puede leer en el Anteproyecto de Ley Orgánica para modificar la Ley Orgánica Educativa (LOE) de 2006, que modificó posteriormente la Lomce en 2013, norma esta última contra la que el PSOE y el Gobierno han mostrado su rechazo infinidad de veces.

Según la citada disposición derogatoria única, quedaría derogada tanto la Lomce de 9 de diciembre de 2013 como el real decreto de 2016 de medidas urgentes para la ampliación del calendario de implantación de la anterior.

Asimismo, quedarían derogadas "cuantas disposiciones de igual o inferior rango se opongan a lo dispuesto en la presente ley". Todo ello ocurriría una vez que el anteproyecto fuera aprobado por el Parlamento.

En el citado anteproyecto, la ministra Isabel Celaá busca volver a los "planteamientos diferentes acerca de la educación que deben necesariamente convivir en un sistema democrático y plural" y con las que, a su juicio, acabó la Lomce.

La reforma educativa de Celaá propone, entre otros puntos, quitar peso en la educación a la Religión (no es de oferta obligatoria en segundo de Bachillerato y la nota de esta materia no computa para conseguir, por ejemplo, una beca) y se elimina la "demanda social" para la oferta de centros concertados.

Gana peso la asignatura de Filosofía, con asignaturas en ambos cursos de Bachillerato, y se introduce en Primaria y Secundaria Educación en Valores Cívicos y Éticos.

Además, permite que sean las Administraciones educativas las que fijen la proporción del uso de la lengua castellana y la lengua cooficial como lengua vehicular, así como las materias que deban ser impartidas en cada una de ellas, pudiendo hacerlo de forma heterogénea en su territorio.

Por otra parte, se podrá conseguir el título de Secundaria con una asignatura suspendida, y quienes cursen Secundaria y no obtengan el título recibirán una certificación oficial en la que constará el número de años cursados y el nivel de adquisición de las competencias básicas.

Los contenidos básicos de las enseñanzas mínimas requerirán el 55% de los horarios escolares para las comunidades autónomas que tengan lengua cooficial y el 65% para aquellas que no la tengan. Además, se podrán establecer currículos mixtos del sistema educativo español y de otros sistemas educativos, conducentes a los títulos respectivos.