Ciudadanos estaría dispuesto a gobernar con el PP en Andalucía aunque el PSOE fuera el partido más votado el próximo 2 de diciembre. Albert Rivera aseguró ayer que "si hay un solo escaño más de cambio que un escaño de continuidad, habrá cambio" en Andalucía. El líder de la formación naranja, que no aclaró lo que ocurriría si el PP queda por delante de su partido y ambos están en condiciones de desbancar a los socialistas. "Si Cs consigue una mayoría parlamentaria para que haya una nueva etapa de esperanza, ilusión y ambición en la Junta de Andalucía, nosotros lo vamos a hacer posible", insistió Rivera. El candidato de Ciudadanos a la presidencia de la Junta, Juan Marín, subraya que solo se ve formando parte de un gobierno presidido por él con el apoyo de otros partidos."No puede cambiar nada con un gobierno que presida el PP o el PSOE en Andalucía", afirmaba ayer Marín en una entrevista con Efe.

Las distancias entre PP y Ciudadanos son evidentes en estos primeros días de campaña. Rivera reconoce que las elecciones andaluzas servirán de "termómetro" de la situación política, pero rechazan que sean un "laboratorio partidista" ni el espacio donde el PP intente resolver su "crisis interna". En cambio, Pablo Casado considera que en Andalucía se disputa la "primera vuelta" de las elecciones locales de mayo del próximo año y de unos posibles comicios generales. El líder del PP, volcado por completo en la campaña electoral, quiere aprovechar la convocatoria electoral como escaparate para "lanzar un nuevo proyecto" popular ante los llamamientos a la urnas que se anuncian en los próximos meses.

Juanma Moreno, el candidato del PP a presidir la Junta de Andalucía, cuestionó ayer la declaración de bienes de la presidenta Susana Díaz, quien asegura tener en su cuenta apenas 80 euros. "Es ridículo, patético y una tomadura de pelo", afirmaba ayer Moreno, quien firmó ante notario que nunca pactará con los socialistas y retó a Ciudadanos a hacer lo mismo.

Con la campaña electoral recién iniciada, el Consejo de Ministros aprobó ayer un plan para el Campo de Gibraltar dotado con "cerca de mil millones" de euros, según cifró el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. El plan involucra a ocho ministerios en diversas actuaciones en la zona. Del total, 21 millones corresponden a Interior e irán destinados a combatir la proliferación del más de medio centenar de grupos criminales organizados que operan en la zona. Para ello se reforzarán las plantillas policiales y judiciales, con especialistas en blanqueo de capitales. El programa incluye también medidas para favorecer la implantación de empresas y anticiparse a los efectos que "Brexit" tenga en el área.

El líder del PP, Pablo Casado, denunció que el Gobierno aprobara ayer, en plena campaña electoral en Andalucía, un plan para el Campo de Gibraltar y acusó a los socialistas de "instrumentalizar" el Ejecutivo para su beneficio electoral. En un mitin en Sevilla, Casado recalcó que él también quiere ayudas para el Campo de Gibraltar y así se lo pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la comparecencia en el Congreso en la que se habló del Brexit. "Ha recordado que en aquel debate pidió ayudas directas, políticas fiscales y un régimen especial para esta zona de Andalucía.