El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean Claude Juncker, tiene una "impresión muy positiva" del proyecto de los presupuestos del Estado para 2019 enviados por el Gobierno a Bruselas. Así se lo habría transmitido ayer al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en un breve encuentro celebrado poco antes del inicio de la reunión del Consejo Europeo. También el Partido Popular llevó a Bruselas su oposición a las cuentas, cuyo único objetivo es "financiar una campaña electoral de dos años", según el líder popular Pablo Casado.

El borrador del presupuesto para el próximo año está desde el lunes sujeto al dictamen de las autoridades comunitarias, para determinar si se cumplen las normas europeas de disciplina presupuestaria y las recomendaciones de la Comisión. La decisión se conocerá a finales de noviembre, pero ya hay algunos indicios de que las cuentas están en la senda de recibir el plácet de la Unión Europea.

Jean Claude Juncker anticipaba ayer una "impresión muy positiva" sobre los números del Ejecutivo español, según fuentes citadas por la agencia "Efe". El presidente de la Comisión se congratuló de las previsiones españolas frente a las cuentas presentadas por otros países, como Italia, convertida ya en la principal preocupación para Bruselas. Sánchez transmitió a Juncker un mensaje de "colaboración, cooperación y compromiso de España con la Unión Europea" con la pretensión de allanar el recorrido de sus presupuestos pendientes de evaluación.

También en Bruselas, Pablo Casado, quien participa en la reunión del Partido Popular Europeo (PPE) previa a la cumbre de la UE, mostró su intención de alertar de las consecuencias negativas derivadas de la aprobación de esos presupuestos, una actitud que Sánchez descalificó como una "deslealtad impropia de un partido de Gobierno". Casado asegura que el único objetivo del presidente es "financiar una campaña electoral de dos años como hizo Zapatero para poder gastarse 6.000 millones de euros".

Datos en 2020

El Ejecutivo pretende aprovechar que hasta marzo de 2020 no se conocerán los datos oficiales de déficit y deuda para, mientras tanto, "gastarse el dinero en promesas innecesarias (...) a costa del futuro déficit y deuda de los españoles", afirma el líder de los populares. Aunque Casado asegura que va a Bruselas a "a hablar bien de España" insta a las instituciones europeas a que "exijan lo mismo" y "apliquen el mismo baremo" al Gobierno de Sánchez que a los ejecutivos del PP.

La capital comunitaria sirvió ayer de segundo escenario al enfrentamiento entre Gobierno y oposición por los presupuestos. El primero fue el Congreso, durante la sesión de control, en la que PP y Ciudadanos calificaron de "ilegales y fraudulentas" unas cuentas que no respetan los límites del déficit ahora fijados. Para Casado, los presupuestos se presentaron "de forma ilegal", mientras que Rivera los considera un "fraude" porque la Cámara Baja no aprobó la senda de déficit del 1,8 sobre el que se sustenta el documento del Ejecutivo.

Partido Popular y Ciudadanos amenazan con bloquear la tramitación del borrador presupuestario en el Congreso.

El secretario general de los populares, Teodoro García Egea, anticipa que desatarán "una ofensiva parlamentaria a todos los niveles".

José Manuel Villegas, secretario general de Ciudadanos abre la puerta a bloquear la tramitación de los presupuestos en la Mesa del Congreso. Si el proyecto de ley del Gobierno refleja el 1,8 por ciento de margen deficitario, la formación naranja intentará el bloqueo.

Cuentas legales

Tanto Pedro Sánchez como la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendieron, frente a las críticas de la oposición, la legalidad del texto pactado con Podemos.

El jefe del Ejecutivo asegura que en diciembre llevará al Congreso unas cuentas con una senda de déficit "recogida y reconocida" por la Cámara, una previsión que se mantendrá mientras no sea revisada. Sánchez instó al PP y a Ciudadanos a que dejen de "obstruir parlamentariamente" una ley que tendrá el voto de la mayoría.