El expresidente de la Generalitat Artur Mas atribuye el juicio en el Tribunal de Cuentas por la consulta del 9-N al "espíritu de venganza" de los abogados de Sociedad Civil Catalana y de la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, quien en su día anunció que la consulta ilegal de 2014 "la pagaríamos nosotros y de nuestros bolsillos".

"Nos quieren inhabilitados y arruinados", manifestó el expresidente catalán al término del juicio en el que se acusa a Mas y a los exconsellers Francesc Homs, Irene Rigau y Joana Ortega de supuestas responsabilidades contables en la consulta soberanista del 9 de noviembre de hace cuatro años."No hubo ni un solo euro de malversación de fondos públicos", aseguró el expresidente de la Generalitat, quien culpa a los colectivos de abogados que presentaron la demanda (Sociedad Civil, Abogados catalanes por la Constitución y Abogacía del Estado) de querer "más pena y más castigo. Esa es la realidad".

Portátiles "para las escuelas"

Los ordenadores portátiles que se utilizaron en las mesas electorales eran "para las escuelas catalanas", sostuvo el expresidente, para quien resulta "irrelevante" que los 2,8 millones de euros con los que se adquirieron estuvieran previamente consignados en la partida para el referéndum ilegal que anuló el Tribunal Constitucional. El expresidente catalán se pregunta: "¿Si tan grave fue el delito por la consulta por qué ni un solo juez o fiscal actuó para pararla?".

El abogado de Sociedad Civil Catalana, Manuel Zunón, aseguraba al término de la sesión que la responsabilidad contable del expresidente Artur Mas y de los tres exconsejeros está "totalmente probada". "No hay controversia: los gastos son lo que son", afirma el abogado, convencido de que Sociedad Civil ganará el juicio.