La tensión se desbordó anoche ante el Parlament al finalizar la manifestación convocada por la ANC y Òmnium Cultural, cuando decenas de manifestantes rompieron el cordón policial para irrumpir en la Cámara catalana. Los Mossos d'Esquadra tuvieron que cargar. Y también se vieron obligados a hacerlo varias veces en Via Laietana, frente a la Jefatura Superior de la Policía, para despejar la calle, después de que se desviara parte de los manifestantes que habían salido de la plaza Cataluña rumbo al paseo Lluís Companys y el Parlament.

En Via Laietana, los Mossos impidieron el sábado un choque entre activistas de los CDR y guardias civiles y policías que habían sido convocados por la asociación Jusapol para reclamar la equiparación salarial con los agentes de la Policía autonómica.

En el Parlament, un grupo de unos 200 manifestantes derribó algunas vallas de protección y las lanzó contra los agentes, a los que también arrojaron pintura, palos de banderas y botellas de agua. Incluso se enfrentaron físicamente a los voluntarios de la ANC que trataban de aplacar los ánimos y evitar que rompieran el cordón policial.

Con las vallas en el suelo, el grupo ganó posiciones y obligó a los Mossos a fijar el cordón policial más atrás, frente a la misma fachada del Parlament, que ha cerrado sus puertas. Los agentes se refugiaron en el interior, pero, tras la llegada de refuerzos, cargaron contra los manifestantes, que se dispersaron por todo el Parque de la Ciudadela.

"El pueblo manda"

Durante el acto que puso punto final a la marcha de la ANC y Òmnium, una parte de los manifestantes abucheó al presidente catalán, Joaquim Torra, y al presidente del Parlament, Roger Torrent, entre gritos de "Buch dimisión", "Puigdemont, nuestro presidente", "Hemos votado, la paciencia se ha acabado" o "El pueblo manda, el gobierno obedece".

Al finalizar el acto, fue nuevamente abucheado por grupos de manifestantes mientras se retiraba de la zona.