La portavoz adjunta de Podemos en el Congreso, Ione Belarra, criticó la decisión del Gobierno de prestar asistencia legal al juez Pablo Llarena frente a la demanda civil planteada en Bélgica por el expresidente catalán Carles Puigdemont y otros procesados por el referéndum independentista.

A su juicio, el Gobierno de Pedro Sánchez debería haberse quedado con su primera reacción, distinguiendo entre la actividad jurisdiccional del juez y lo que no lo es: "La actitud inicial del Gobierno era la más adecuada porque intentar o pretender defender con el dinero de todos los españoles por una cuestión privada a un juez no nos parece lo más adecuado", señaló.

El diputado de ERC Gabriel Rufián consideró que el cambio de decisión del Gobierno,demuestra la "poca valentía" de su presidente, Pedro Sánchez, y del PSOE y "la nula separación de poderes en el Estado".

En declaraciones a los periodistas, Rufián señaló que el hecho de que "defiendan a un juez que se ha mostrado lacayo de según qué despachos de Génova 13, lo que hace es constatar que el PSOE lo único que quiere es no molestar mucho".

Por su parte, el portavoz del PDeCAT en el Congreso, Carles Campuzano, cree que el Gobierno se equivoca al defender al juez Pablo Llarena y achaca la decisión del Ejecutivo a que se ha "amedrentado" ante la presión de "la derecha mediática y política". "Estamos convencidos de que no tiene ningún sentido que el Gobierno proteja y ampare las declaraciones de Llarena en un medio de comunicación formulando acusaciones falsas al señor Puigdemont".