Con tensiones políticas soterradas, pero sin auténtica unidad institucional, y protagonismo dominante de las víctimas. Así se anticipan hoy los actos en recuerdos de los atentados de hace un año en Barcelona, cuando el terrorista Younes Abouyaaqoub, al volante de una furgoneta, dejó en la Rambla un rastro de 134 personas atropelladas, de las que 14 fallecieron.

La plaza Cataluña servirá de escenario a la ceremonia oficial de homenaje a quienes perecieron por la violencia terrorista. Será un acto sobrio y sin intervenciones, que habrían puesto en peligro el frágil consenso institucional en torno a una conmemoración que se anticipaba polémica, hasta que el independentismo renunció a convertir la presencia del Rey en una oportunidad para reivindicar el proceso secesionista. Junto a Felipe VI estarán el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el presidente catalán, Quim Torra, quien antes leerá una declaración institucional en el Palau de la Generalitat acompañado de todo el Govern; y la alcaldesa Ada Colau.

La presidenta de la corporación barcelonesa se anticipó ayer a los actos oficiales con una declaración criticada desde la oposición local por no estar consensuada. Colau celebra que, pese al daño causado, los terroristas no consiguieran "contagiar su odio" y proclama a Barcelona como "ciudad de paz" que "no olvidará nunca a las víctimas".

Frente a estas manifestaciones, la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas (Acvot) lamenta la falta de una invitación de Colau, organizadora de la conmemoración, al acto institucional, por lo que ayer hizo una ofrenda floral en la Rambla, con presencia de miembros de todas las fuerzas de seguridad que actúan en Cataluña.

Los representantes de las víctimas instaron a evitar la politización de los actos, una petición en la que coincidieron también el Ejecutivo de Sánchez y partidos como Ciudadanos. La CUP, Òmnium y ANC estarán ausentes de la celebración oficial en protesta por la presencia del Rey. El soberanismo catalán organizará su propio homenaje a las víctimas ante la prisión de Lledoners, donde están presos el exvicepresidente Junqueras, los exconsejeros Romeva, Turull, Rull y Forn, además del diputado de JxCat Jordi Sànchez y el líder de Òmnium, Jordi Cuixart.

Los Comités de Defensa de la República (CDR) tienen convocada para hoy una marcha de homenaje a las víctimas, a la que seguirá por la tarde otra marcha silenciosa en Barcelona en protesta por la presencia del Rey. Por su parte, la Unión Monárquica de España organiza en Barcelona un acto en apoyo del monarca.

Un total de 900 profesionales de medios de comunicación de 29 países están acreditados para cubrir el acto de conmemoración de los atentados, al que asistirán unas 150 víctimas y familiares de doce países.