El exdirigente de CDC Oriol Pujol aceptó ayer ante la Audiencia de Barcelona una condena de dos años y medio de cárcel por cobrar comisiones ilegales de empresarios afines del sector de las ITV, con lo que evita ser juzgado por un tribunal popular. Una vez dicte la condena, la magistrada Carmen Zabalegui convocará una vista para que las partes se pronuncien sobre su ejecución. Xavier Melero, el abogado del hijo del expresidente catalán, ya adelantó que pedirá que se suspenda la pena de cárcel para su cliente, invocando la última reforma del Código Penal y el hecho de que ninguno de los tres delitos de su condena supera los dos años de cárcel: uno y medio (falsedad), ocho meses (cohecho) y cinco meses (tráfico de influencias).