El Gobierno más femenino del planeta -son datos de la ONU- no puede reunirse en Consejo de Ministros. Lo vio claro ayer por la mañana su vicepresidenta, Carmen Calvo, quien decidió sobre la marcha alterar el tradicional texto preparado por Zarzuela para que los nuevos miembros del Ejecutivo no se equivocasen al prometer sus cargos. Y, en su voz, "las deliberaciones del Consejo de Ministros" se convirtieron en las del "Consejo de Ministras y Ministros". Once a seis es, más que mayoría absoluta, mayoría cualificada. Y obliga.

El camino abierto por Calvo fue seguido por la mayoría de sus compañeros de gabinete, con la excepción de Josep Borrell (Exteriores), José Luis Ábalos (Fomento) y Nadia Calviño (Economía), quien remató como pudo tras trabucarse con las "deliberaciones" a cuyo secreto se obliga el Consejo.

Tras la toma de posesión -con promesa sobre la Carta Magna y sin crucifijo ni biblia-, los traspasos de cartera generaron agradecimientos, besos, abrazos y, en algunos casos, adelantos de líneas de actuación. Calvo declaró "admiración intelectual" a su predecesora, Soraya Sáenz de Santamaría, a la vez que se fijaba el objetivo de construir "la gran igualdad", la de hombres y mujeres. Borrell, fiel a su fama altanera, mandó callar a algunos murmuradores, y Calviño desveló que su predecesor en Economía, Román Escolano, fue su preparador de oposiciones.

En cuanto a los adelantos, la responsable de Hacienda, María Jesús Montero, reveló que hoy mismo empezará a elaborar los Presupuestos de 2019, por lo que quiere tener pactado en el Congreso el techo de gasto este mismo mes. La ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, anunció "un replanteamiento total de la reforma laboral", y para conseguirlo prometió "diálogo social con sindicatos y patronal". Además, se mostró convencida de que se conseguirá un "gran acuerdo" sobre pensiones en el marco del Pacto de Toledo. La responsable de Sanidad, Carmen Montón, se comprometió a recuperar la sanidad universal, "que nos arrebataron como derecho de ciudadanía en 2012".

Mientras el Ejecutivo -17 ministerios y 24 secretarías de Estado, con el control del CNI en manos de Margarita Robles (Defensa)- le va tomando la medida a sus carteras, el Congreso afila su oposición. PP, Unidos Podemos y Cs ya han registrado solicitudes de comparencia de todas las ministras y ministros. Hoy, primera reunión del Consejo.