Joaquim Torra avanzó ayer que piensa pedir una reunión a Mariano Rajoy en cuanto tome posesión del cargo de presidente de la Generalitat. Será por carta y en la misiva el mandatario electo le pedirá al jefe del Ejecutivo "día y lugar" para celebrar el encuentro, en el que exigirá poner fin al artículo 155 y al control de las finanzas catalanas.

Todo ello lo anunció Torra en su primer acto público tras su investidura el lunes en el Parlament: una rueda de prensa en Berlín con Carles Puigdemont, a quien rindió obediencia una vez más al presentarse a sí mismo como president de "custodia".

Pese a exponer sin tapujos que el objetivo de la reunión que pide a Rajoy es hacerle dos exigencias, Torra presentó el diálogo que ofrece al presidente del Gobierno como "sin condiciones previas". Desde Bulgaria, donde ayer por la tarde se encontraba, el jefe del Ejecutivo se declaró "disponible para hablar" con Torra, si bien puso una condición: "Hablar dentro de la ley"

"Por supuesto que voy a recibir al presidente de la Generalitat si él me lo pide", aseguró Rajoy en la capital búlgara, donde asiste a un Consejo Europeo informal. "Le escucharé con mucha atención", añadió el líder del PP. Eso sí, pidió a Torra un "esfuerzo" para que el diálogo entre ambos no sea como el que mantuvo con Puigdemont, que -reconoció- "no fue fácil".

En la rueda de prensa en la capital alemana, Torra y Puigdemont escenificaron el doble liderazgo que pretenden darle al nuevo Govern, pero el president destituido por el 155 se esforzó en otorgar a Torra la condición de verdadero mandatario, pese a que él mismo se ha definido como gobernante "provisional".

Así, además no plantearse elecciones anticipadas, aseguró que el Ejecutivo catalán está ahora "en las mejores manos" y que será Torra quien "tome las decisiones" del futuro Govern, que deberá ser "fuerte" y sobre cuya composición, según Torra, Puigdemont "tiene mucho que decir".

El president electo pretende "restituir" el Govern destituido por el 155 y ha pedido a los consejeros que están en la cárcel y huidos de la justicia que repitan en sus cargos. Los de ERC ya le han dicho que no. Oriol Junqueras, Raül Romeva, Carles Mundó, Meritxell Serret y Dolors Bassa prefieren "ayudar al nuevo consejero desde fuera" y quieren que sus continuadores "tengan manos libres en la nueva etapa". El exconsejero Toni Comín no ha tomado aún una decisión, informaba anoche el diario "El País".

En declaraciones a la radio pública catalana antes de viajar a Berlín, Torra adelantó que cuando se reúna con Rajoy, le pedirá "respeto por el derecho a la autodeterminación". Pero, dado que ayer priorizó el diálogo sobre la desobediencia, la CUP le sacó la primera "tarjeta roja".

En la sesión de investidura del lunes, Torra pidió a los diputados "cuperos" que dieran "la alerta" cuando le vieran "caer en la tentación del autonomismo".