El juez Pablo Llarena procesará el viernes a los cuatro líderes independentistas que están en prisión, Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Cuixart y Joaquim Forn. De ellos, solo Junqueras y Sànchez son diputados, aunque este último ha anunciado que renunciará al acta. Y además manifestó al magistrado que su intención actual es volver de nuevo a la docencia.

Como Junqueras ya está en prisión, en cuanto se dicte auto de procesamiento contra él, y éste sea firme (es decir, que el Supremo decida sobre los recursos de apelación, si los hubiere) quedará inhabilitado y perderá su condición de diputado en el Parlament.

Y otro tanto les ocurriría a los seis imputados que han sido convocados a la vistilla de medidas cautelares de mañana si el magistrado del Supremo decreta prisión contra ellos: los exconsejeros Jordi Turull, Josep Rull, Dolors Bassa y Raül Romeva, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y la secretaria general de ERC, Marta Rovira.

El artículo 384 bis de la ley de Enjuiciamiento Criminal prevé la inhabilitación de cargos públicos imputados por rebelión si al finalizar la instrucción de la causa y dictarse auto firme de procesamiento ha sido decretada contra ellos la prisión provisional.

Es decir, que aunque el juez ordenara mañana el ingreso en prisión provisional de los seis citados a la vistilla, la inhabilitación no sería efectiva hasta que el auto de procesamiento fuese firma y se resuelvan todos los recursos que puedan presentarse los imputados y las acusaciones.

Los seis investigados citados el viernes ya han comparecido ante Llarena a lo largo de la instrucción. En el caso de Turull, Rull, Romeva y Bassa, los cuatro estuvieron el pasado otoño un mes en prisión provisional, dictada primero por la Audiencia Nacional. Fueron puestos en libertad por Llarena cuando la causa pasó al Supremo bajo fianzas de 100.000 euros.

Por su parte, Carme Forcadell pasó una noche en la cárcel, ya que el juez decretó prisión eludible con fianza de 150.000 euros la noche del 9 de noviembre de 2017 y la expresidenta del Parlament hizo efectivo el pago de la fianza a la mañana siguiente. En cuanto a Rovira, compareció en el alto tribunal el pasado 19 de febrero y Llarena ordenó libertad bajo fianza de 60.000 euros.

Órdenes europeas

Una vez que se dicte el auto de procesamiento, Llarena seguramente reactivará las órdenes europeas de arresto contra Carles Puigdemont y los cuatro exconsejeros que huyeron con él a Bélgica. Asimismo, el instructor podría pedir la detención de la exdiputada de la CUP Anna Gabriel.