Las negociaciones entre Junts per Catalunya (JxC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que parecen haber entrado en su fase final, vuelven a estar encalladas. Alcanzado el consenso para que Carles Puigdemont no sea investido ante el Parlament por vía telemática, sino "legitimado" en Bruselas por un consejo de la república de nueva creación, el problema reside en quién le sustituye como candidato ante la Cámara. Y caso de ser el elegido un diputado encarcelado o con riesgo de ser inhabilitado en breve plazo, quién se haría cargo de la Vicepresidencia y de la Consejería de Presidencia, sobre lo que tampoco hay acuerdo.

Según informaron fuentes conocedoras de las conversaciones, ERC habría consentido ya en que sea Jordi Sànchez, en prisión, quien se presente a la investidura para ser elegido presidente de la Generalitat. El siguiente puesto en importancia, la Vicepresidencia, sería, pues, para Esquerra. Y aquí vienen las discrepancias: JxC habría puesto como condición que sea para Oriol Junqueras, también encarcelado, pero los republicanos quieren elegir sin imposiciones. La escogida podría ser Marta Rovira.

"Tiranteces"

El portavoz de ERC, Sergi Sabrià, admitió ayer que está habiendo "tiranteces" en la recta final "de una negociación capital para el futuro del país", porque permitirá formar el Govern que levante el artículo 155. Esa necesidad determina la "urgencia" del acuerdo, a cuya consecución su partido no quiere poner fecha.

Eso sí, el portavoz de los republicanos reclamó a sus socios "generosidad" y "responsabilidad", y declaró su "absoluto optimismo" para cerrar un acuerdo "en las próximas horas o días".

No le ven así las fuentes de JxC consultadas por Europa Press, que mostraron su perplejidad por lo que denominaron "renuncias" de ERC al mandato surgido del referéndum del 1-O. Pero, además de ser menos optimista, la "lista del president" reprochó a Esquerra que haya centrado las negociaciones en el reparto de las carteras. "No estamos en una negociación de un Govern autonómico", advirtieron, añadiendo que ningún escenario se ha descartado todavía, ni siquiera el de repetir las elecciones.

Según la prensa digital independentista, las dos fuerzas han pactado repartirse al 50 por ciento las 14 consejerías que tendría el nuevo Govern, una menos que el Ejecutivo destituido el pasado mes de octubre.

Además de Vicepresidencia, ERC aspira a hacerse con la Consejería de Presidencia -al frente de la cual JxC quiere poner a Jordi Turull, en libertad provisional- y asumir la portavocía.

En este contexto, Cs exigió al presidente del Parlament, Roger Torrent, que hoy convoque para el próximo martes "el pleno del desbloqueo" o, si no, acudirán al Tribunal Constitucional.